Casi la mitad de los productos y servicios que componen la canasta del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) -que llegan a 483- registraron un aumento de más del 3% en los últimos doce meses. Es decir, han aumentado más de valor, en términos reales, que el objetivo inflacionario fijado por el Banco Central.
De acuerdo al estudio realizado por Alejandro Fernández, economista y socio de la consultora Gemines, en términos agregados se observa que mes a mes, más productos exhiben un incremento de precios superior al 3%, esto medido en doce meses.
En mayo pasado -cuando comenzó a observarse el alza de la inflación-, el 35% de los productos incluidos en la canasta registraba alzas mayores al objetivo inflacionario del Banco Central de 3% anual. El escenario se repitió en 2007: durante los meses de julio, con un 39%; septiembre, con 46%; diciembre con 48%, para terminar en enero de este año con un 49,8% de los productos por sobre el porcentaje establecido como meta por el Banco Central.
Pero además de ser la mitad de la canasta la que presenta esta alza, los productos que han subido de precio son relevantes en la composición de la misma, representando el 64,8% en términos de peso relativo al interior de ella.
Entre los elementos con mayores alzas en enero de 2008, destacan el pan corriente (22,6%), la bencina sin plomo (13%), almuerzo (12,7%), cigarrillos (9,1%), teléfono básico (6,3%) y servicios financieros (7,7%), entre otros. Gran parte de este aumento observado en los servicios y elementos de la canasta, se produce en el ítem de los servicios básicos.
Así, los precios más altos se observan en el gas de ciudad, que subió un 35,3%, seguido por la electricidad con 28,8% y bastante más atrás el agua potable con 9,8%.
Este incremento sostenido no sólo tiene impacto en la meta inflacionaria de 3% del Central, o en los pasos que deberá seguir en términos de subir o bajar la tasa de interés en los próximos meses. Sino que además, impacta directamente en la capacidad de consumo de las personas al incidir fuertemente sobre el presupuesto del hogar.
El jueves pasado el Banco Central decidió mantener la tasa de política monetaria (TPM) en 6,25% anual, manteniendo el sesgo al alza, y no descartó la posibilidad de realizar nuevos ajustes en la TPM, para llevar la inflación al rango meta de 3%.
Expectativas
Ya la encuesta de expectativas económicas del Banco Central había arrojado en febrero una baja en las proyecciones de inflación para diciembre de este año, desde 4 a 3,8%, y hacia diciembre de 2009, desde 3,3 a 3,2%.
Además, los encuestados anticipaban la mantención de la tasa de interés, hasta abril inclusive, previendo que en diciembre de 2008 cerrará en un 6%.
Pero dado que lo que comenzó como un shock de combustibles, electricidad y siguió luego con algunos productos afectados por las heladas, se ha ido generalizando. En opinión de Fernández, actualmente hay una inercia y una expectativa inflacionaria a raíz de que la tasa de interés sigue siendo expansiva, por lo que, independiente de la pausa de febrero, es inevitable que en marzo o abril el Central la suba.