lunes, 11 de febrero de 2008
Economía y Negocios Online, El Mercurio
El Presidente Rafael Correa dijo que las compañías del sector deberán invertir más o, de lo contrario, se les caducará su permiso de operación.
Un complejo momento vive la industria petrolera en Ecuador. A los elevados impuestos que pagan por operar en ese país -el Estado ecuatoriano les exige el 99% de las ganancias extras producto del mayor precio del crudo- se suma una fuerte amenaza lanzada por el gobierno del Presidente Rafael Correa, quien anunció que podría revocar los permisos de operación si las empresas no elevan sus inversiones en ese país.
La caída que muestra la inversión petrolera en Ecuador ha reducido dramáticamente las reservas de crudo. Esto, incluso, pone en riesgo la permanencia del país en la OPEP, considerando que, de mantenerse la actual situación, Ecuador no tendrá una alta producción.
"Si no hemos llegado a una conclusión y no me siguen invirtiendo, tomaré otra clase de medidas", dijo Correa a la cadena informativa Telesur.
"Aquí no les voy a permitir que nos boicoteen la producción petrolera, que no hagan inversiones. O invierten o, bueno, actuaremos conforme a derecho", agregó Correa.
Uno de los actores de mediana relevancia en el sector petrolero ecuatoriano es la chilena Enap. A través de Sipetrol Ecuador, realiza tareas de exploración y explotación en ese país.
Megainversión
Sin embargo, Enap puede elevar su producción si prospera la propuesta que hizo junto a la compañía china Sinopec, la brasileña Petrobras y la estatal venezolana PDVSA para operar el yacimiento ITT, que está en plena selva de Ecuador.
La última palabra la tiene el gobierno del Presidente Correa, quien tendrá que evaluar la iniciativa de las compañías de gastar US$ 50 millones en estudios para complementar la información existente sobre ITT. De prosperar, el consorcio -en el que Enap participará con 20%- invertirá hasta US$ 10.000 millones.
