lunes, 11 de febrero de 2008
Gustavo Orellana V.
Economía y Negocios Online, El Mercurio
Privados materializarán inversiones récord en el período, las que, en total, superarán los US$53 mil millones. Energía aporta US$20.896 millones, y Minería, US$14.227 millones
Dos de cada tres pesos que invertirá el sector privado en el período 2007-2011 irán a parar a proyectos de minería y energía.
Estos dos sectores -fuertemente ligados- son los motores que están disparando la inversión para el quinquenio, según datos dados a conocer por la Corporación de Bienes de Capital (CBC) a partir de su base de proyectos a diciembre de 2007.
En efecto, si a septiembre del año pasado el total de proyectos alcanzaba los US$ 44.684 millones, a diciembre la cifra se había elevado en más de US$ 53 mil millones; esto es, 20% más.
Energía aporta US$ 20.896 millones, lo que representa el 39,1% del total de proyectos. Minería, en cambio, aporta US$ 14.227 millones, el 27%.
Además, de un año a otro -entre 2006 y 2007-, las inversiones previstas por el sector privado se elevaron 54%, desde US$ 34 mil millones.
La clave está en el alto precio del cobre. El mercado del metal rojo, hoy en situación de demanda expansiva y que completará en 2008 su tercer año consecutivo con precios por sobre los US$ 3 la libra, ha impulsado a las empresas mineras a desarrollar sus proyectos y ampliar su base de producción actual, invirtiendo fuertes sumas en proyectos para lograrlo. Pero, además, estas iniciativas requieren de energía para concretarse, lo que impulsa, a su vez, la construcción de nuevas centrales, sobre todo en el norte del país, que concentra sobre el 60% de la producción de cobre nacional.
SIC y SING
Otro factor que impulsa la construcción de nuevas centrales es la estrechez del sistema eléctrico, fundamentalmente el SIC y el SING, que abastecen al centro y norte del país.
A la construcción de dos terminales de Gas Natural Licuado (GNL), en Mejillones y Quintero, se suman las cinco centrales hidroeléctricas que las empresas Endesa y Colbún (a través de la sociedad HidroAysén) proyectan desarrollar en la XI Región, que sumada a su respectiva línea de transmisión, costarán, al menos, US$ 4 mil millones.
El dinamismo también alcanza a los sectores inmobiliario e industrial, que elevan sus inversiones en 20 y 79%, respectivamente, comparando los datos de septiembre y diciembre de 2007. Si bien ningún sector cae, no se vislumbran nuevos proyectos en la industria forestal, que mantiene sus perspectivas ancladas en los US$ 244 millones, y en puertos, que alcanzan US$ 381 millones.
En el caso de las madereras, la entrada en producción de dos grandes proyectos, Santa Fe II (CMPC) y Nueva Aldea (Arauco), no ha encontrado sucesores.
Antofagasta lidera carpeta de proyectos
Antofagasta, con importantes proyectos mineros y energéticos, es la región que recibirá más inversiones en el quinquenio 2007-2011, alcanzando los US$ 9.879 millones.
La ejecución de los proyectos mineros Esperanza (US$ 1.100 millones, de la empresa Antofagasta Minerals), Gabriela Mistral (US$ 900 millones, de la estatal Codelco) y súlfuros de Radomiro Tomic (US$ 700 millones), se suman a la construcción de centrales térmicas como Angamos y Kelar, que disparan las inversiones para el período.
Levemente más atrás, se encuentra la Región Metropolitana, que maneja una cartera de proyectos por US$ 9.802 millones para el quinquenio. Cierra el "top 3" Atacama, donde iniciativas mineras impulsadas por empresas como CAP (Hierro Atacama) y Barrick (Cerro Casale y Pascua Lama) elevan hasta US$ 9.017 millones las inversiones previstas.
Pero hay más. Si se incluyen todos los proyectos de inversión con cronograma de desarrollo definido -cuyas cifras son recopiladas por la Corporación de Bienes de Capital (CBC) e informados por las propias compañías-, los proyectos futuros suman US$ 105 mil millones.
La cifra representa un incremento de 28% en comparación con el total de las inversiones presentes en la base de proyectos de la CBC a diciembre del año 2006, que alcanzaba "sólo" los US$ 82 mil millones.
