domingo, 03 de febrero de 2008
Alejandro Sáez Rojas
Enfoques, Economía y Negocios Online
Los programas públicos de trabajo contribuirán de manera importante a la ocupación, seguidos del comercio y la industria. Por su parte, los que menos aportan son electricidad, gas y agua.
Las alzas y bajas de las bolsas mundiales pueden ser un fenómeno lejano. Pero se siente mucho más cuando anticipan un deterioro de la economía que termina por afectar el empleo, justo donde le duele a la mayor parte de las personas.
Hasta ahora, hay expertos que continúan anticipando que la economía chilena crecerá del orden de 5% este año. Con ese escenario, la mayor parte de los sectores económicos crearán nuevos puestos de trabajo. Sin embargo, la amenaza de una recesión mayor en los Estados Unidos, como han temido los mercados financieros, pone una sombra de duda sobre el empleo futuro.
Cerca de 130.000 empleos se crearán en la economía chilena este año, estima el economista Alejandro Alarcón. Una cifra un poco menor a la que plantea la Cámara de Comercio de Santiago, que estima que, en total en el país, se abrirán 143.000 nuevas plazas.
Pero ojo, advierte el propio Alarcón, diferente será el escenario para el empleo si es que la desaceleración de los Estados Unidos se transforma derechamente en una recesión seria, prolongada y profunda. En ese caso, la economía local se expandirá mucho menos, "aunque es probable que los efectos sobre la ocupación no se sientan tanto en 2008 como en el próximo año", sentencia.
"La economía chilena está en una situación frágil", estima el académico de la Universidad Alberto Hurtado, Carlos García: "La actividad se está desacelerando, el entorno empeora ante la posibilidad de una recesión en los Estados Unidos, y sigue presente el alto costo de la energía". Cree que noticias más negativas sobre estas variables repercutirán en una menor actividad y al final del día impactarán al empleo.
Para la Cámara de Comercio de Santiago, el "mercado laboral mostrará un desempeño menos activo que en 2007".
De acuerdo con el análisis de Alarcón, la construcción continuará liderando la creación de empleos, así como los servicios financieros, que es un sector robusto en términos de generación de utilidades y demanda por mano de obra calificada.
El sector público también ve aumentada su participación. En este ítem se incluyen los programas de empleo, que aún se siguen aplicando.
La industria está en una situación más complicada, cree García: "Le están subiendo las tasas de interés, ha caído el tipo de cambio y el mundo va a crecer menos". En ese contexto, se anticipa que pueda ser menos dinámica en generar puestos de trabajo.
Este cuadro lo confirma el análisis de la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa). De acuerdo con este gremio, los principales factores que amenazan el crecimiento en 2008 son "la apreciación del tipo de cambio, que está afectando a las industrias sustituidoras de importaciones; la crisis en EE.UU., que está afectando las exportaciones de la industria maderera a ese país; los altos costos de la energía y las mayores restricciones de gas natural argentino.
"Con lo anterior, los niveles de empleo no experimentarán cambios respecto de 2007", estima la Sofofa.
En la agricultura también hay problemas que pueden afectar al empleo. "En tiempos más buenos, el sector podía generar entre 30.000 y 40.000 empleos anuales", estima la gerenta de estudios de la Sociedad Nacional de Agricultura, Ema Budinich. Uno de los factores que más pesan en el rubro es el costo creciente de la mano de obra. Según Alarcón, la agricultura creará alrededor de 15 mil empleos.
