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Se espera que el servicio funcione en régimen en marzo:

La Línea 6 fue aprobada por el público, pese a dudas con máquinas de pago y señalética

viernes, 03 de noviembre de 2017

Manuel Valencia y Dierk Gotschlich
Nacional
El Mercurio

Servicio operó con un tren cada cuatro minutos en hora punta. Su alto potencial obligará a ampliar la flota, vaticinan expertos.



Hasta las 16:00 horas de ayer, las 10 estaciones de la Línea 6 del metro de Santiago seguían con sus rejas cerradas. Detrás de ellas, grupos de usuarios aguardaban la apertura como si se tratara del concierto de una estrella del pop en el Estadio Nacional. A las 16:01, en simultáneo, las puertas fueron abiertas, y la gente comenzó a repletar los recintos.

El ingreso más festivo se dio en Cerrillos, donde la estatal organizó una fiesta ciudadana. En medio de globos y serpentinas, y entonando el himno nacional, los vecinos ingresaron aplaudiendo, mientras atestiguaban el mayor salto tecnológico del metro en su historia.

La nueva línea fue aprobada por el público, que no cesaba de tomarse fotos y grabar videos con sus celulares. Hasta las 20:00 horas, 40 mil personas la habían utilizado. "Me ha parecido buenísimo, es todo muy moderno. Me voy a demorar 40 minutos en lo que me demoraba dos horas", aseguró Felipe Zúñiga (26), de Cerrillos.

Con todo, fue evidente que la Línea 6 también trae un cambio cultural para los usuarios.

"Me da un poco de miedo que no tenga chofer", decía María Eugenia Lozano, mientras esperaba el primer tren. Arriba se armaban filas de pasajeros que intentaban aprender a usar las máquinas de recarga de las tarjetas bip.

"Encuentro fome que no acepten monedas, porque igual sirven. Que no dé vueltos me obliga a hacer la fila de nuevo, y eso retrasa", reclamaba Nataly Catrileo (21). Su queja fue compartida por Sandra Quezada (54): "La máquina no me dejó cargar la tarjeta. Puede ser que el sistema sea un poco engorroso al principio, pero creo que más adelante va a mejorar".

Respecto de estos dispositivos, la gerenta de Clientes y Sostenibilidad de Metro, María Irene Soto, recordó que previo a la puesta en marcha hubo un piloto en la estación Barrancas (Línea 5). "Al comienzo los clientes se molestaron porque habíamos eliminado a los cajeros, pero a las dos semanas aprendieron la nueva modalidad. Esperamos lo mismo en este caso".

Otra observación de los usuarios es que la línea aún no tiene cobertura de todas las compañías de teléfonos móviles, salvo Entel. "Quedamos incomunicados. Ojalá arreglen eso, porque hoy no se concibe que un servicio no permita viajar y usar el tiempo en trabajar", dijo Sandra Marín, de Ñuñoa.

Los pasajeros también echaron de menos los letreros que tradicionalmente informan los nombres de las estaciones en el resto de la red. Por el bloqueo visual que generan las nuevas puertas de andén, en la Línea 6 los nombres de las estaciones están pintados junto con logotipos al centro de los muros y en paneles informativos dentro de los trenes.

"Uno está acostumbrado a mirar y buscar el nombre, y es posible que mucha gente mayor se pierda", planteó Luz Alicia Escobar (60), de Providencia.

Si bien Metro no dio cifras de su impacto en la red, "El Mercurio" recorrió el trazado y las líneas 1 y 2 en hora punta, y constató un menor flujo de pasajeros en estaciones como Universidad de Chile, y un incremento, como se anticipaba, en otras de combinación, como Los Leones y Franklin.

Más trenes

Tal escenario se consolidaría cuando la línea opere en régimen, hacia marzo, vaticina el gerente general de Metro, Rubén Alvarado. Según estima, la Línea 6 quitará hasta un 15% del flujo de la Línea 1, unos 100 mil pasajeros diarios.

Para al ex director de Metro y especialista en transportes de la U. Diego Portales, Louis de Grange, los beneficios del nuevo trazado recargarán los trenes especialmente entre estaciones como Franklin (combinación con Línea 2) y Ñuble (Línea 5) hacia el oriente, "lo que obliga a revisar si es conveniente mantener una frecuencia de un tren cada cuatro o cinco minutos. Si se requiere menos, se debe aumentar la flota de 15 trenes de la línea".

Para ello, según el ex ministro de Transportes Pedro Pablo Errázuriz, el contrato con la española CAF incluye la opción de adquirir más trenes, "pero creo que conviene abrir el proceso y volver a competir por más trenes".

Para el director del Centro de Desarrollo Urbano Sustentable, Juan Carlos Muñoz, la Línea 6 tendrá buena demanda y esta crecerá cuando se agreguen las nuevas líneas programadas. "Una forma efectiva de aumentar la capacidad de la línea sin comprar trenes es disponer de la operación expresa roja-verde. Con eso se aumenta la velocidad, lo que permite elevar la frecuencia y la capacidad".

Vandalismo
Ayer ya circulaban en redes sociales fotos de rayados en las ventanas de los trenes.

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