viernes, 01 de febrero de 2008
E. OLIVARES y L. CASTAÑEDA
Economía y Negocios Online, El Mercurio
Director de LyD, Cristián Larroulet, dice que urge eliminar restricciones que dañan la competitividad de las empresas.
El ministro de Hacienda, Andrés Velasco, evitó polemizar con su par del Interior, Edmundo Pérez Yoma, por las opiniones de este último de que es el Banco Central el que tiene más herramientas para abordar el bajo tipo de cambio. "Entiendo que la alusión y el reconocimiento (de Pérez Yoma) es el punto del gran aporte fiscal que ha hecho la política pública, la política de gasto y en impuestos del Gobierno para mantener los equilibrios macro", planteó Velasco.
Sin embargo, Pérez Yoma añadió su receta: "Lo que se puede es solamente medidas que vengan, como dice Sebastián Edwards, del Banco Central". Edwards le ha pedido que intervenga el mercado cambiario.
Velasco sólo respondió: "No comento las aseveraciones de analistas como Edwards. Respecto de lo que dijo el ministro Pérez Yoma: "Claro que uno de los determinantes de la política cambiaria son las acciones que tome el Banco Central, por supuesto". Pero remarcó que la labor de Hacienda en "políticas públicas" no está cerrada.
Para el director ejecutivo del Instituto Libertad y Desarrollo (LyD), Cristián Larroulet, lo más urgente hoy es permitir que el tipo de cambio libre funcione para así tener un tipo de cambio real (TCR) de largo plazo que sea atractivo y, por otro lado, eliminar las restricciones que restan competitividad a las empresas.
El TCR es explicado por el tipo de cambio nominal (TCN) y el precio de los factores que inciden en la producción de un bien. Una mala infraestructura, una regulación excesiva o un impuesto distorsionador, como el de timbres y estampillas que grava los créditos, encarecen la producción de un bien, dice Larroulet. Y agrega que las pequeñas y medianas empresas son las más afectadas.
La tarea urgente, reitera, es actuar por el lado microeconómico y sus prioridades están en la eliminación del impuesto de timbres; reducir el número de trámites para iniciar actividades, actualmente de unos 20 días, y también bajar el número de trámites para cerrar una empresa.
Larroulet no ve actualmente problemas de diferencias de información en el mercado cambiario que aconsejen que el Banco Central haga una intervención.
Populismo
En otro plano, el ministro Velasco se mostró satisfecho por el apoyo político y de analistas a su manejo de contención fiscal, ahora que hay crisis. "Se ve claro -dijo- que los llamados populistas eran malos para la gente. Los resultados los estaríamos viendo hoy".
