Danza e integración
martes, 17 de octubre de 2017
Por A.D.
Reportaje
El Mercurio
Distintas técnicas y disciplinas se unen en el programa Movimiento Integrador, impulsado por la bailarina Marisol Hume, que lleva a colegios en comunas de escasos recursos el método que enseña a sus alumnas. La meta es lograr el desarrollo armónico de tres tipos de inteligencia: instintiva-corporal, emocional y cognitiva.
Alumnos desde pre kinder a cuarto medio han vivido la experiencia propuesta por Marisol Hume, coreógrafa y maestra de danza. Se trata de talleres en los que el movimiento se convierte en una herramienta para el desarrollo de lo que llama "trilogía MIV": motivación, imaginación, voluntad. "Tres poderosas fuerzas que yacen detrás de todo acto humano, desde los más humildes a los más gloriosos", dice. El programa, que se conoce como "Movimiento Integrador" y se basa en las clases que Marisol dicta en Santiago, se ha estado aplicando este año en el Liceo Entre Aguas, en Llico, comuna de Vichuquén. La bailarina lo define como un sistema vivo, creativo y vital, que se va adaptando a las realidades de cada lugar. De hecho, se aplica también en una escuela artística para niños en Uruguay y se enseña en España, en el centro para formación de profesorado Montessori Canela. Hume explica que la base de estos talleres es unir el cuerpo, la mente y la liberación de la energía, trabajando a partir de la integración de lo que llama "inteligencia instintiva corporal", unida a la inteligencia emocional y cognitiva. "Tan menoscabada desde la infancia, la inteligencia emocional es clave para generar seres humanos integrados, amorosos, empáticos y, por ende, un mundo mejor y más feliz", explica. A la inteligencia racional, por otro lado, le da una nueva mirada, "no desde el deglutir datos e información, sino desde cómo entrenar las funciones cognitivas para tener autodominio y autocontrol". En los talleres se trabaja, a través del potencial terapéutico y renovador del movimiento del cuerpo, la atención, memoria y concentración, además del lenguaje y la visualización; por eso Marisol define su propuesta como "un trabajo corporo-mental", cuyo objetivo es promover el desarrollo armónico del individuo, con equilibrio energético. Si bien se trabaja con escolares de todas las edades, el foco está en los de enseñanza media y también participan algunos profesores y apoderados que se interesen en cultivar la atención, la autoobservación y el desarrollo de la creatividad, actitudes y prácticas que para Hume son el punto de partida para la transformación del ser. "Quienes participan tienen la oportunidad de vivenciar la libertad y el poder de la inteligencia creadora, con una respuesta masiva positiva y muy alentadora. Una especie de despertar y de inspiración para continuar con los actos creativos que hacen de la cotidianeidad una realidad hermosa e inspiradora", cuenta Marisol. Más información en www.sistemamovimientointegrador.com
