Cierre de acceso al cerro Manquehue abre debate sobre seguridad de otros senderos
sábado, 23 de septiembre de 2017
Judith Herrera C.
Nacional
El Mercurio
Sin la Vía Roja, la seguridad es la principal preocupación de excursionistas y vecinos, ya que esa ruta era la menos peligrosa y con más información para la subida.
Quebradas, fácil desorientación, diferentes sendas e incluso asaltos. Son algunas de las preocupaciones que tienen hoy excursionistas y vecinos del cerro Manquehue, luego que la Municipalidad de Vitacura, por orden de la Corte Suprema, tuviera que cerrar el acceso de la Vía Roja, el que, explican, era la forma más segura de ascender. Junto con esta existen otras tres alternativas convencionales de acceso: Agua del Palo, por avenida Santa María; Golf de Manquehue, desde Los Trapenses; y El Carbón, por el sector de La Pirámide. Sin embargo, estos otros senderos serían más peligrosos que el que, hasta ahora, era el acceso principal. Para Cristóbal Muñoz, fundador de DeTrekking, comunidad dedicada a este deporte, prohibir un acceso es "una mala medida, porque la gente entonces subirá por alternativas más peligrosas y sin la información necesaria, ya que, al ser un cerro privado, la gente no consulta con los dueños". El cierre de Vía Roja, que quedó habilitada solo para los residentes, se origina por un fallo de la Corte Suprema con el fin de ejecutar medidas de reparación ambiental, con la supervisión de Conaf, el SAG y el Servicio Nacional de Geología y Minería. Respecto de esto, Muñoz explica que se debe "hacer un trabajo de educación, ya que no porque se cierre la gente no va a llegar. Se debe educar en cuanto a qué cosas se pueden hacer o no en un cerro, como no llevar mascotas a la zona, así se pueden evitar actividades de fuerte impacto ambiental". Hans Gübelin, vecino de la zona de Agua del Palo, sostiene que la vía cerrada era "más segura, porque estaba marcada. La que está acá tiene más quebradas y es más fácil perderse, tenemos muchos operativos de bomberos y rescatistas por lo mismo". Además, añade que es "muy probable que, debido al cierre de la otra ruta, aumenten las personas que accedan por acá o por otra de las zonas que necesitan un trabajo para marcar la ruta". Para los excursionistas, frente a esta situación, es necesario que las autoridades formalicen un acceso para poder practicar el deporte. José Ignacio Peñafiel, quien practica esta actividad, sostiene que se deben "ver qué opciones más se pueden ofrecer que tengan seguridad, que es lo que daba Vía Roja, donde estaba todo bien marcado". Añade que "sería bueno analizar este tema con la comuna, porque es de interés común". En esa línea, desde la Municipalidad de Vitacura explican que, como los faldeos del cerro son privados, propiedad de la familia Rabat, se encuentran en conversaciones para formalizar uno de estos accesos, para hacerlo más seguro para los excursionistas.
Existen tres alternativas a la Vía Roja para poder subir el cerro.
