viernes, 11 de enero de 2008
G. ORELLANA, M. RIVEROS Y F. URROZ
Economía y Negocios Online, El Mercurio
En caso de que se derogara el impuesto específico a los combustibles, el litro de gasolina podría costar $467.
Datos prácticos para ahorrar en bencina
No sólo el precio internacional del petróleo es el responsable de que los bolsillos de los automovilistas sigan sufriendo cada vez que carguen combustible. También tiene la culpa -y en más del 40%- el fisco, que se lleva $307 de los cerca de $700 que se pagan hoy en Santiago por un litro de gasolina.
Si a los $700 se le descontara el 100% del tributo específico -que esta semana representa el 33,2% del precio- el litro de bencina costaría $467. Y si en vez de eliminarlo se redujera al 50%, los chilenos gastarían $583 cada vez que carguen un litro de gasolina. Estos valores, manteniendo el IVA que se cobra a las gasolinas, y que hoy representa el 10,7% del valor total.
Para el diésel, el IVA significa el 14,3% del precio, pero este combustible paga menos impuesto específico.
Con las bencinas en precios tan altos como los que comenzaron a regir ayer jueves -al hacerse efectiva un alza de $21 por litro- la discusión acerca de la vigencia del impuesto específico a los combustibles, cuya misión es tanto reducir el consumo -al ser contaminante- y financiar la mantención de carreteras y caminos, retomó fuerza.
Entre otros, el diputado radical Fernando Meza y el alcalde de Estación Central, Gustavo Hasbún, exigieron al Gobierno que considere una reducción.
Pero el ministro de Hacienda, Andrés Velasco, frenó las intenciones de tomar esta medida y dijo que la herramienta que seguirá utilizando el Gobierno es el Fondo de Estabilización del Precio de los Combustibles (FEPC) y defendió su vigencia.
A través de una fórmula, el FEPC entrega un crédito o cobra un impuesto al precio de las bencinas, dependiendo de su precio. Pero, pese a que esta semana se registren precios muy altos, tendrá un efecto neutro.
"El fondo en los últimos meses le ha dado aportes adicionales a la gente que gasta en bencina", explicó Velasco, defendiendo su existencia.
Según la economista de Econsult, Michèle Labbé, la derogación de este tributo es algo "viable", pero que requiere voluntad política.
Voces críticas
De cualquier manera, Labbé aseguró que el FEPC ha demostrado su ineficacia como método para ayudar a los automovilistas a sortear, de mejor manera este ciclo de precios altos.
"El Gobierno debe estar, en este minuto al menos, en proceso de análisis de su derogación o reducción. Esto tiene que ver con que el FEPC ha demostrado que sólo entrega subsidios, los que no pueden ser focalizados. Existen formas más eficientes de entregar aportes mayores y uno de esos es reducir este tributo", aseguró.
Agregó que el fisco no eleva su recaudación cuando sube el precio, porque el impuesto específico es cobrado a través de un monto fijo por cada m3 de gasolina, y no como un porcentaje.
FEPC: Aprobación con "reparos"
"Apruebo con reparos" es la frase más repetida en el Congreso cuando se consulta sobre la inyección de recursos que el ministro de Hacienda, Andrés Velasco -afirmó-, solicitaría el Ejecutivo al Congreso, para el Fondo de Estabilización de Precios del Combustible (FEPC).
El proyecto de ley implicaría una entrega de fondos similar a los de junio de 2007, cuando se depositaron US$ 60 millones, con el fin de que ese monto fuese utilizado hasta 2010. Sin embargo, ante las constantes alzas del petróleo y sus derivados, actualmente sólo queda un 20% del depósito, por lo que se hace necesaria la anunciada inyección. Ante la "urgencia", los parlamentarios estarían en su gran mayoría por aprobar los recursos, pero no sin antes hacer ver sus reparos.
En esa línea, el senador Jaime Orpis ha renovado sus proposiciones acerca de implementar un gravamen distinto. "Formalmente se le ha planteado al ministro de Hacienda tener un impuesto móvil, que se reduce cuando el precio de los combustibles llega a $600". Diversos parlamentarios insistirán en necesidad de bajar el impuesto específico.
