Las autoras detrás de

"Tan linda y Tan solita"

martes, 19 de septiembre de 2017
Por Antonia Domeyko. Foto: Carla Dannemann.
Entrevista
El Mercurio

Estas dos jóvenes, June García y Josefa Araos, buscan con este nuevo libro acercar el feminismo a las personas. Un texto que, a menos de un mes de salir a la venta, ha hecho ruido en las redes sociales, al invitar a los lectores a compartir sus experiencias e impresiones, abriendo un nuevo espacio de debate.

Una joven de unos 18 años, de polera listada blanco con negro, jeans y mochila camina por la calle José Victorino Lastarria. Al llegar a la esquina con Villavicencio, se saca los audífonos de sus oídos y entra a una casona del sector, esas de dos pisos. A los pocos segundos otra joven -también con mochila y audífonos- entra por la misma puerta. Van al lanzamiento del libro "Tan linda y tan solita. El libro del fin del patriarcado", escrito por dos jóvenes como ellas, Josefa Araos, de 19 años, y June García, de 21, estudiantes de Derecho en la Universidad de Chile.

Adentro de la casona, el centro cultural Casa O, las sillas están copadas, y la gente se amontona en los costados para poder estar más cerca del mesón donde están June y Josefa: dos niñas chilenas que se conocieron en la universidad, que venían desde sus colegios con una inquietud feminista, que sentían impotencia cuando conocían casos de violencia y abuso contra las mujeres en la televisión, y que querían hacer algo al respecto, pero que no sabían qué. Hasta que se conocieron.

La idea del libro se la propuso Josefa a June, y lo hicieron con un objetivo claro:

-Transmitir el feminismo de una forma simple y llevarlo a espacios donde no se conoce tanto -dice June García. Y Josefa Araos agrega:

-Un libro agradable, entretenido y también pedagógico para que, por ejemplo, el adolescente de 14 años deje de gritarle feminazi a su compañera.

Armaron así un libro para adolescentes que, como ellas dicen, busca "prender la llama del feminismo". El texto cuenta la historia de una niña -como ellas- que vive distintas situaciones de machismo y violencia, y que poco a poco se va transformando en feminista. Un relato inspirado en experiencias personales y de cercanos, que combinan con un poco de historia del movimiento, con mujeres referentes, con conceptos y con actividades, que las he llevado a ser un éxito en redes sociales, al invitar a sus lectores a compartir sus experiencias con el hashtag que lleva el título del libro: #tanlindaytansolita.

-Es la representación del machismo chileno más cotidiano, naturalizado: decir un piropo -dice June.

La motivación

En Pío Nono, en la entrada de la Escuela de Derecho de la Universidad de Chile, June García y Josefa Araos están sentadas juntas en un banco de cemento. Antes de que se conocieran en los primeros días de clases de 2016, antes de que escribieran un libro juntas, June y Josefa crecieron en realidades diferentes, pero en las que cada una encontró un camino hacia el feminismo.

June García es de Santiago, su padre es médico, y su madre se dedica al corretaje de propiedades. Estudió en el Colegio Santiago College, y allí tuvo una profesora en un electivo de literatura que empezó a hablarle de feminismo y género. El tema le interesó y decidió investigar en Facebook, donde se enteró de congresos sobre educación sexista. Era 2011, pleno auge del movimiento estudiantil, y June tenía 15 años.

-Iba sola a estos congresos. Es fuerte estar en un espacio tan privilegiado y ver que a la gente no le interesan otras cosas, porque está cómoda donde está. Volvía a mi colegio y pensaba: 'por qué nadie está hablando de esto' -dice June.

Entre las clases con la profesora de literatura y los encuentros a los que se escabullía, June comenzó a identificarse con el feminismo y decidió expresarlo pegando afiches en los baños de su colegio.

Paralelamente, en Chimbarongo, en la Sexta Región, crecía Josefa Araos,  hija de un padre ingeniero comercial y una madre administradora de empresa. A diferencia de June, Josefa era revoltosa, pasó por varios colegios, y terminó en el Liceo de Chimbarongo, ahí vivió una situación que la marcó.

-Tenía un profesor de física, un ramo en el que me iba bien, pero el profesor me decía que no me iba a servir de nada ser buena alumna porque después me iba a casar y me iba a quedar en Chimbarongo y no iba a llegar a ninguna parte -recuerda Josefa, quien   empezó a investigar y leer blogs de educación y feminismo, pero no era fácil encontrar información.

-Me acuerdo que me costó mucho conseguir "El segundo sexo", de Simone de Beauvoir -cuenta Josefa, quien tenía muchas ideas en su cabeza, pero no sabía cómo canalizarlas. Hoy Josefa tiene un canal en Youtube donde comenta libros, tiene más de 17 mil suscriptores y más de 500 mil reproducciones.

Unos años después, en 2016, Josefa y June se encontraron en los pasillos de la Escuela de Derecho y se dieron cuenta de que habían vivido situaciones similares. Ambas recuerdan con asombro, cuando tenían 10 y 12 respectivamente, y fue elegida por primera vez la Presidenta Michelle Bachelet, porque era una mujer. También ambas tenían un interés por el feminismo que querían desarrollar, y las dos habían sufrido en la adolescencia un desorden alimentario.

A June la pasó en tercero medio, comenzó a hacer dietas. Un período, dice, en el que se obsesionó con su cuerpo, y tuvo que recibir ayuda de un psicólogo.

-Llegué a bajar 10 kilos. Es un estado mental de odiarte tanto, pero después de entender que no es un problema tuyo, es algo que a ti te hicieron, es algo de la sociedad, del patriarcado, de los estándares de belleza que nos imponen -cuenta June.

Josefa, sentada junto a ella, agrega:

-Es una etapa que vivimos casi todas las niñas. Me acuerdo de ver revistas con puras mujeres regias y flacas, y sentía que mi cuerpo nunca iba ser aceptado. Por eso, a pesar de ser flaca, hice millones de dietas.

Al llegar a la universidad, June y Josefa encontraron un lugar donde el feminismo sí era un tema, y armaron una instancia que llamaron Aula feminista.

-Pero afuera de la universidad había mucha gente que no entendía o no quería entender el feminismo. Lo veíamos en amigas, familias, y también en redes sociales. Por eso quisimos hacer el libro -dice June.
 
Historias reales

En un capítulo del libro, la protagonista, Julieta, decide comenzar a militar en un movimiento estudiantil feminista. Participa entusiasmada, hasta que asiste a una fiesta en la que el coordinador político se le acerca, le toca indebidamente y la fuerza a que bailen. Al rato, él comienza a propasarse, hasta que Julieta decide salir corriendo. Al día siguiente, la protagonista lo comenta con una compañera y le dice que lo quiere denunciar de acoso, a lo que su amiga le contesta: "Si denuncias al coordinador, tú vas a ser la que va a quedar fuera".

-No es algo que me haya pasado a mí -dice June, y agrega- pero sí lo veo harto en organizaciones políticas, se declaran feministas, pero igual hay machismo.

Así armaron el libro, a partir de situaciones cotidianas, de experiencias personales y de cercanos. El libro recorre desde la infancia hasta la maternidad del personaje, y cuenta cómo durante ese período se enfrentó a situaciones como la violencia intrafamiliar, y otras como acoso callejero. A partir de experiencias como estas las autoras explican, en una de las secciones de listados con conceptos que aparecen en el libro, lo que sería el micromachismo.

-Es la forma más naturalizada de violencia que se nos ejerce en el día a día, y que la ejercemos todos y todas, incluso siendo feministas. El mundo no se va a acabar porque la gente deje de decir piropos, pero si va a cambiar la cultura -dice June.

El libro poco más de un mes a la venta, publicado por Penguin Random House, y está entre los más vendidos de las librerías Antártica y Qué Leo.

Con el hashtag #tanlindaytanbonita se han publicado en redes sociales las respuestas a la actividades y test del libro, y también les han llegado casos de acoso y violencia que los lectores comparten.

También han recibido críticas: las han llamado feminazis, han hecho memes, les han dicho que parece de autoayuda, o que esperaban algo más teórico.

-Hay que entender lo que el libro pretende. Es un libro súper básico, simple, que busca encender esa llamita de feminismo en las personas. No pretende formarte, eso toma mucho tiempo -dice Josefa.

"El micro- machismo es la forma más naturalizada de violencia (...) y la ejercemos todos, incluso siendo feministas".