Dólar Obs: $ 954,58 | 0,40% IPSA -0,25%
Fondos Mutuos
UF: 37.237,20
IPC: 0,40%
Sus rectores y decanos se han involucrado directamente en las presentaciones ante el Tribunal Constitucional:

"Duelo de gigantes": U. de Chile y U. Católica se enfrentan en el TC por despenalización del aborto

miércoles, 16 de agosto de 2017

Gabriel Pardo
Nacional
El Mercurio

Mientras el decano de la Facultad de Derecho de la U. de Chile, Davor Harasic, expondrá representando al rector Vivaldi, desde la U. Católica lo harán el vicerrector Juan A. Larraín y el constitucionalista Patricio Zapata.



El miércoles de la semana pasada, el decano de la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile, Davor Harasic, recibió un llamado.

Era el rector Ennio Vivaldi. Quería hablar sobre el requerimiento presentado ante el Tribunal Constitucional que cuestiona la constitucionalidad del proyecto de despenalización del aborto en tres causales (peligro de muerte de la madre, inviabilidad fetal y violación).

"Te quiero pedir que tú alegues ante el TC a favor del proyecto, en representación de la facultad, pero además quiero hacerme parte yo como rector, y que alegues como abogado del rector de la Universidad de Chile". Así recuerda Harasic las palabras de Vivaldi.

Esa misma semana, en la Universidad Católica, el rector Ignacio Sánchez junto al decano de la Facultad de Derecho, Carlos Frontaura, se preparaban para la presentación que realizarían como casa de estudios ante el TC.

Si bien en un principio era el propio rector quien esperaba exponer ante el tribunal, el retraso de las audiencias públicas y un viaje que se inició ayer al foro de educación superior Chile-Suecia -al que también está invitado Ennio Vivaldi- lo impidieron.

Así, el jueves 10 de agosto se hacía público que sería el vicerrector Juan Agustín Larraín uno de los expositores, y el otro, el constitucionalista Patricio Zapata, quien ahondaría en el concepto de persona y la objeción de conciencia.

Harasic: "La pregunta es penalizo o no penalizo a la persona"

La participación activa de las dos universidades es comentada en los pasillos de sus facultades como un verdadero "duelo de gigantes", que reedita debates que las dos instituciones han liderado en la historia republicana.

"Es primera vez que como facultad y como universidad vamos a comparecer ante el TC", dice Harasic, quien asegura que está plenamente consciente de que "la U. de Chile está para recrear la república, así que tenemos que estar presentes en estos debates".

"Como nunca, tenemos la obligación de llevar la discusión a lo jurídico, sin perjuicio de respetar lo valórico. Tengo que analizar esto desde el punto de vista del derecho. Si es que para el derecho esto amerita una penalización. Eso no significa que yo necesariamente crea que la persona que está en esta situación lo deba hacer. La pregunta simplemente es: ¿penalizo a la persona o no la penalizo? Y si no la penalizo, ¿eso es contrario a derecho o es favorable a derecho? Aquí la discusión no es si estoy a favor o en contra del aborto. Esa es una discusión a la que nos han tratado de llevar y que es artificiosa", agrega el decano de Derecho de la U. de Chile, en su oficina en Pío Nono, quien afirma que es contrario al aborto. Pero enfatiza que esta discusión jurídica no es "entre abortistas y no abortistas".

Desde el decanato de Derecho de la UC, a una pocas cuadras, Carlos Frontaura afirma que "la universidad ha manifestado inequívocamente que, desde un punto de vista científico, no cabe duda alguna de que hay vida humana desde el momento de la concepción y ese es el único momento claramente diferente (diferenciador) que causa todo el proceso biológico que viene a continuación. Desde un punto de vista jurídico, ello implica que la protección constitucional de la persona surge en ese momento, pues ya tenemos un ser humano".

Y enfatiza que "el proyecto es más que una despenalización, porque está concebido de manera en que vuelve legal y legítimo el aborto en las tres causales, estableciendo, adicionalmente, una prestación de salud que puede exigirse y es obligatorio dar, salvo las muy excepcionales situaciones que ella contempla respecto de la objeción de conciencia".

La discusión estará enfocada en el Artículo 19 N°1 de la Carta Fundamental: "La Constitución asegura a todas las personas el derecho a la vida y a la integridad física y psíquica de la persona. La ley protege la vida del que está por nacer".

Despliegue de equipos

Ambas universidades han desplegado equipos para enfrentar el debate. Desde la U. de Chile afirman que han trabajado los Departamentos de Ciencias Penales y el Centro de Derechos Humanos, entre otros. Realizaron varias reuniones previas y se decidió que el decano expusiera una posición que representara a la facultad, dejando en claro que no hubo una posición unánime, porque hubo académicos católicos que expusieron su objeción para sumarse. No será la primera vez que Harasic expondrá ante el TC, pues alegó a favor de la entrega de la píldora del día después representando al Ejecutivo en 2008, fallo que fue adverso para el gobierno.

La Universidad Católica ha involucrado no solo ha profesionales del Derecho, sino también a la Escuela de Medicina. De hecho, desde un principio, el rector Sánchez ha señalado que en los centros médicos de la universidad no se practicarán abortos.

Uno de los involucrados en la U. de Chile es Juan Pablo Mañalich, quien en dos ocasiones concurrió al Parlamento a referirse al proyecto de ley.

El abogado plantea que esta iniciativa "nos va a poner en un piso mínimo de países con ciertos estándares de reconocimiento de derechos a la igualdad en el trato de toda persona".

Otro de los que han participado del debate es Jaime Winter, miembro del Departamento de Ciencias Penales. "La Constitución en el artículo primero les reconoce la dignidad a las personas desde el momento de nacer. Todos entendemos que es el momento de separación de la madre. Algunos han tratado de interpretar que el nacimiento fue un eufemismo que usó el legislador para decir la concepción. Desde el punto de vista constitucional, es claro lo que se debería resolver".

Zapata: "El ser que crece dentro de su madre no es un órgano suyo"

La elección del constitucionalista Patricio Zapata para exponer la posición de la U. Católica fue muy cuidada.

Carlos Frontaura señala que "el profesor Zapata hace casi treinta años investigó y publicó sobre el concepto de persona en nuestra Constitución ("Persona y Embrión Humano"), sosteniendo, justificadamente, que dicha noción incluye al ser humano desde la concepción y que, por lo mismo, el que está por nacer es titular del derecho a la vida".

Zapata, abogado UC, militante democratacristiano, quien presidió el consejo ciudadano de observadores del proceso constituyente, publicó el domingo en Reportajes de "El Mercurio" - junto a Soledad Alvear- un artículo en que sostiene: "Nos parece de toda evidencia que existe individuo de la especie humana desde el principio de la vida intrauterina (...) El ser que crece dentro de su madre no es un órgano suyo ni un tumor. Es un organismo con un programa genético propio y que, dadas las condiciones adecuadas, irá desenvolviéndose hasta encontrarse en condiciones de vivir fuera del útero".

Luego de las audiencias públicas, en las que están inscritas más de 100 instituciones, vendrán los alegatos, que se esperan para este viernes. Aunque no estarán representando a las universidades, profesionales de ambas casas de estudios tendrán protagonismo.

En ellos estará dando a conocer la posición del Gobierno Alfredo Etcheberry, destacado penalista y profesor emérito de la U. de Chile.

Representando a los senadores y diputados que presentaron requerimientos ante el TC estarán dos reconocidos académicos de la U. Católica, Miguel Ángel Fernández y Ángela Vivanco.

Vivanco adelanta que la idea "es abarcar todos los aspectos jurídicos y ser precisos para no entrar en discusiones religiosas, políticas o de otra especie".

Y resume: "Este proyecto usa un lenguaje bastante eufemístico porque dice que va a despenalizar la interrupción voluntaria del embarazo en tres causales. Y, en primer término, no despenaliza, legaliza. En segundo término, no es interrupción del embarazo, es aborto. Y en tercer lugar, las tres causales no son tan acotadas como parecen". Y agrega: "Este proyecto no tiene a la vista en absoluto derechos ni intereses del que está por nacer".

 Imprimir Noticia  Enviar Noticia