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La familia está cumpliendo 130 años desde que partió haciendo vinos en Chile

Familia Bouchon diversifica negocios: se suma a la producción de espumantes y avellanos

domingo, 23 de julio de 2017


Economía y Negocios Domingo
El Mercurio




Un proceso de diversificación y crecimiento en diferentes áreas de negocios está protagonizando la familia Bouchon, los históricos dueños de Viña Bouchon.

Al tradicional negocio vitivinícola en el que la familia lleva más de un siglo, está sumando la producción de espumantes, negocio en el que debutaron en noviembre. A la vez, el año pasado, la familia inició la plantación de avellanos en el valle del Maule. Partieron con 120 hectáreas, y este año prevén duplicar y llegar a las 240 hectáreas, pensando en obtener su primera cosecha en 2019 de este producto.

El presidente de la compañía, Julio Bouchon Sepúlveda, explica que una de las razones que hacen atractivo este cultivo es que posee una "mecanización óptima", en el sentido de que requiere poca mano de obra. Además, está el relativo bajo riesgo climático de este cultivo, una demanda estable y creciente, y que hay pocos lugares en el mundo que tienen las condiciones para producir avellanos europeos, y Chile es uno de ellos.

En el negocio de los espumantes, la firma debutó con un producto premium , negocio en el que esperan seguir creciendo.

"Esto es definitivamente meterse al negocio. Es justo lo contrario al vino, el mercado interno es muy interesante, y vimos que hay una oportunidad en este segmento para hacer productos más novedosos, porque vemos que se está consumiendo mucho espumante en Chile, pero al mismo tiempo se ha estandarizado mucho la oferta. Está controlado por unas pocas marcas, con productos muy similares, y vemos que hay una oportunidad de diferenciarse. Queremos ser un actor relevante dentro del segmento premium ", detalla Juan José Bouchon Lyon, gerente general de la compañía, abogado, 38 años, y uno de los tres hijos de Julio Bouchon Sepúlveda, e integrante de la cuarta generación que ya está integrada de lleno en el manejo de los negocios.

Junto a él también participan en la compañía su hermano Julio Bouchon Lyon (periodista, 45 años), actual director ejecutivo de la compañía, y María Ignacia, dedicada al área de relaciones públicas y mercado nacional de la viña.

Previo a integrarse a los negocios familiares, Juan José Bouchon se dedicó a trabajar en su profesión, en el estudio Carey; luego en Nueva York, después nuevamente en Carey, y posteriormente como subdirector de la Oficina de Competitividad y jefe de gabinete del Ministerio de Economía durante el gobierno de Sebastián Piñera. Risueño, dice "la sangre fue más fuerte", al aludir a su integración al negocio familiar tras desarrollar dicha carrera en el mundo legal.

De Saint Emilion al Maule

Precisamente el área vitivinícola de la familia está cumpliendo 130 años de existencia, desde que, en 1887, llegara a Chile Emile Bouchon, en el barco "Orduña", proveniente de Saint Emilion, Francia, e iniciara el negocio. Primero partió como asesor enológico de la entonces viña Vioroux, ubicada en Quinta Normal, y luego comprando su propia viña en Colchagua, Angostura, que luego los hijos varones de Emile Bouchon, Antonio y Abel, llamaron Bouchon Hermanos.

Esa segunda generación -que también integraron las hermanas María Luisa y Josefina- continuó en el negocio, pero tras diversos avatares surgidos por la reforma agraria, Julio Bouchon Sepúlveda, uno de los hijos de Antonio, decidió asentarse definitivamente en el Maule para continuar en la industria. Se trata justamente del valle del secano costero de la zona de Mingre, entre San Javier y Constitución, el terroir donde sigue instalada la compañía.

"Yo aposté por el secano costero del Maule. A mí me gustaba el clima que tenía, vi un gran potencial", cuenta el actual patriarca, de 75 años, agrónomo de la Universidad de Chile y enólogo de la Universidad de Burdeos (Francia), quien comenzó dichas compras en el Maule, en 1975, tras su regreso del Viejo Mundo.

Allí hoy disponen de 200 hectáreas de viñedo -y un hotel-, siempre con la premisa de que en lo posible la producción provenga de sus propios viñedos y orientada totalmente a la producción de vinos pr emium , que destinan a 30 mercados del mundo, y con un promedio de venta de US$ 40 por caja, bastante mayor al promedio nacional, que ronda los US$ 27 por caja.

Para 2017 proyectan ventas por unas 100 mil cajas y continuar subiendo el precio promedio, que en los últimos tres años han logrado que crezca en US$ 10, explica Emilio Bouchon hijo.

Para conmemorar estos 130 años de historia en la industria vitivinícola, la viña se apresta a sacar su primer vino ícono, una edición limitada que se llamará 130 Años, un blend cosecha de 2007, que venderán en el equivalente a $120 mil la botella de tres litros y que orientarán preferentemente a los mercados de China, Rusia, Inglaterra y Chile. La expectativa de los socios es lanzar el 1 de agosto esta edición de unas mil botellas.

Del área vitivinícola de las Empresas Bouchon también se desprende un joint venture que desde 2013 tienen en partes iguales con la sudafricana Cederberg, vinculada al enólogo David Nieuwoudt. Es la viña Longaví, que produce en los valles de Leyda, Colchagua, Maule e Itata, y con la que están en proceso de crecer y explorar nuevas cepas menos habituales en valles nacionales y sí en Sudáfrica: cinsault y chenin blanc, producciones previstas para el próximo año.

Al margen del negocio vitivinícola, la familia también está creciendo en el rubro inmobiliario, pues disponen de propiedades en varias ciudades de Chile, como San Fernando y Coquimbo. En lo más inmediato, para el segundo semestre de 2018 planean partir con el proyecto Mirador del Valle, un condominio de 230 casas ubicado en Chicureo, que llevan adelante en sociedad con Indesa, de los hermanos Nicolás y Felipe Ibáñez.

Tercera y cuarta generación de un negocio que está cumpliendo 130 añosLos hermanos Julio y Juan José Bouchon Lyon, junto a su padre Julio Bouchon Sepúlveda, los dueños de Viña Bouchon y de un conjunto de otras sociedades que integran negocios inmobiliarios, de cultivo de frutales y, desde el año pasado, avellanas. Para conmemorar los 130 años en el negocio vitivinícola, celebrarán junto a los descendientes de las diversas ramas familiares Bouchon, aunque no sean parte de la propiedad de la compañía. Ya tienen confirmados a unos 50 participantes. Entre los miembros de la familia figuran el ex ministro Luis Mayol Bouchon, nieto de Abel Bouchon, y Abel Bouchon Silva, ex gerente de Embotelladora Andina, también nieto de Abel Bouchon.

CON LONGAVÍ, la viña que es un joint venture en partes iguales con la sudafricana Cederberg, exploran crecer con cepas poco habituales en Chile, como cinsault y chenin blanc.

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