"Somos unos guerreros, de esa forma jugamos y de esa forma moriremos"
sábado, 24 de junio de 2017
Raúl Neira Enviado especial a Moscú
Deportes
El Mercurio
El motor de la Roja se ve feliz en Rusia: por lo bien que anda el equipo y por la jerarquía del torneo. "Los rivales nos respetan", asegura el futbolista, quien cada vez parece más gravitante en la selección nacional.
H ace un par de días, Juan Román Riquelme -uno de los grandes jugadores que dio el fútbol argentino en los últimos 20 años- dijo sobre Andrés Iniesta y su relevancia en el Barcelona: "Si hay mucha gente por acá, él va por allá, Iniesta siempre está donde tiene que estar, buscando las zonas de libre tránsito". Guardando las proporciones, con Marcelo Díaz sucede algo parecido en la Roja: si en la izquierda hay congestión, él juega hacia la derecha. Si los flancos están obstruidos, retrocede. Siempre lleva la pelota hacia donde no hay nadie. "Las canchas son increíbles, los estadios son increíbles, puedes hacer lo que se te dé la gana en la cancha. Son ideales para hacer buen fútbol, para presionar, para hacer algo vistoso para el público. Y la gente lo está disfrutando. Yo también", asegura el volante del Celta de Vigo. "Quedamos con sensaciones muy positivas", agrega a propósito del empate con Alemania. "Sabemos que jugamos un gran partido y somos conscientes de que al frente teníamos un rival potente. El empate era lo más justo. Enfrentamos al campeón del mundo, con grandísimos futbolistas. Siempre jugamos a ganar. Y si no se puede ganar, tampoco podemos perder. El equipo estuvo muy maduro en todo momento, defendiendo y atacando", afirmó. -Durante los pasajes iniciales del partido, Alemania mostró hasta respeto hacia ustedes... "Eso nos tiene que dejar un poco de orgullo y de enseñanza. Los equipos ya nos conocen, saben a lo que juega Chile y tratan de encontrar soluciones porque siempre jugamos de la misma forma, vamos al frente contra cualquiera, independiente de quien sea el rival. Me alegro que nos hayan tenido respecto y no hayan presionado". -¿Algo de rabia por haber sido superiores y terminar igualados? "Con Alemania hemos disputado partidos muy intensos, muy equilibrados en todo sentido. Son dos equipos que prácticamente juegan a lo mismo, a realizar mucha presión, a tocar bien el balón, a replegarse cuando no tienen la pelota...". -Habló de enseñanza. ¿Cuál es la principal lección que le deja el juego con los alemanes? "Jugando así podemos ganarle a cualquiera. Seguimos aprendiendo, seguimos creciendo. Aun hay mucho por mejorar". -¿Le sorprendió el planteamiento germano? Muchas veces aparecían defendiendo con una línea de cinco y luego cuatro volantes... "No me sorprendió, porque hay equipos que saben a lo que jugamos y buscan soluciones a lo que planteamos. Esperábamos que jugaran así, planteamos un partido muy inteligente". -¿El equipo corrió mucho en el primer tiempo y luego bajó el ritmo? "Sí, mira, hay que jugar con amor propio, tratar siempre de dar más del 100 por ciento. Muchas veces estás cansado, pero sigues corriendo porque estás defendiendo a todo un país, estás defendiendo a tu familia. Ves a tus compañeros corriendo, tirándose al piso y al final corres y corres sin descanso. Somos como nos ven, somos unos guerreros. De esa forma estamos jugando y de esa forma moriremos". "¿Jugar con México en semifinales? Sería un partido más, nada especial, aunque ni siquiera pensamos en eso, sino en ganar a Australia el domingo (mañana)"
