Frente a la polémica del mayor impuesto que tienen que pagar a partir de este año los fondos de inversión internacionales sobre sus dividendos obtenidos a partir de sus inversiones en acciones locales -en vez de un 35%, en la mayoría de los casos tendrán que desembolsar un 44,45%-, el mercado sigue planteando sus posiciones frente al tema. El abogado tributarista de Tax Advisors, Benjamín Bernstein, confirma que los fondos de inversión extranjeros tendrán que pagar 44,45% sobre sus dividendos "siempre y cuando el origen de los dividendos distribuidos no provenga de un ingreso calificado como no constitutivo de renta, como son aquellas utilidades obtenidas por las ventas de acciones o rescates de fondos mutuos de la Ley del Mercado de Valores, que cumplan con los requisitos señalados en la Ley de Impuesto a la Renta. Por el contrario, cualquier utilidad afecta al impuesto de primera categoría es igualmente tributable al momento de su remesa al extranjero, ya que a contar del 1 de enero de este año 2017 se derogó el Impuesto Único de Primera Categoría". Preocupación en el mercado de capitales Desde uno de los principales bancos de inversión y administradores de fondos globales, Credit Suisse, sacan la voz por los actores internacionales y sostienen que "la reforma tributaria ha sido considerada por el mercado financiero como un freno a la inversión local, pero se suponía que iba a buscar ser neutra para los inversionistas internacionales. Sin embargo, como no se ha armado un proceso para tratar este tema específico, podría desincentivarse la inversión extranjera institucional y corporativa en Chile", sentencia Adrián Neuhauser, country manager de la institución en Chile y responsable local del negocio de banca de inversión. Germán Guerrero, socio de la firma de inversiones y corredora de bolsa MBI, indica que "esto es una muestra más de lo mal que se hacen las cosas en Chile". Aunque advierte que este impacto era conocido y no debiera ser una sorpresa, sostiene que "deja un impuesto altísimo para estándares internacionales que desincentiva la inversión en Chile". Afirma que "si existe interés y preocupación por la inversión en Chile tanto de locales y extranjeros, más allá de los discursos, esto es algo que se debiera cambiar". Lo anterior, agrega, porque "los fondos extranjeros en el mercado local son muy importantes y si se les hace poco atractivo invertir en Chile, finalmente el precio de las acciones será menor".