Dólar Obs: $ 948,61 | -0,72% IPSA -0,25%
Fondos Mutuos
UF: 37.242,15
IPC: 0,40%
¿Qué pasa con el empleo en Chile?

miércoles, 26 de abril de 2017

Economía y Negocios


Alejandro Alarcón
Economista

En los momentos que escribo me informo de la desocupación en el gran Santiago que llegó 7,7% en marzo, de acuerdo a lo informado por el Centro de Microdatos de la Universidad de Chile. La cifra establece un aumento de 1.2 puntos porcentuales en la cesantía respecto a diciembre de 2016. Además, adelanta que la información del INE, a ser publicada en los próximos días, mostrará también un deterioro. Es, por lo tanto, una materia de preocupación.

Sabíamos que la desaceleración de la economía, lo que se ha intensificado en los últimos meses llevando a la profesión a disminuir la proyección de crecimiento del PIB para el presente año a una cifra que probablemente se ubicará entre 1 y 1,5%, lo que de forma clara disminuye la creación de empleo, especialmente el asalariado. Es decir, el ciclo económico a la baja disminuye la creación de empleos de buena calidad y aumenta la tasa de desempleo. Asimismo, esto es consecuencia de la caída de la tasa de inversión de la economía, la que ha disminuido durante los tres años precedentes y es muy probable que durante 2017 vuelva a caer. El informe de política monetaria ya reportó un ajuste que situó dicho crecimiento en una cifra muy cercana a cero.

Las malas noticias, por ende, vienen del ciclo económico y de la falta de inversión, con lo que es imposible que ante la caída en un período tan prolongado de ésta, podamos observar mejoras significativas en materia de empleo.

De la misma forma, en el desglose de estas cifras el trabajo asalariado crece en un 1.8% en doce meses, lo cual fue ampliamente destacado por las autoridades, pero en el mismo periodo, el empleo por cuenta propia experimentó un aumento de 15.2%, lo que es casi 10 veces más que el asalariado. Esto refleja que la tendencia hacia una estructura del mercado laboral con mayor crecimiento del empleo por cuenta propia, de menor calidad, menos compensado en promedio, más volátil y con menos apoyo social, está consolidado en ese mercado escondiendo las cifras de empleo precario, que si lo midiéramos como parte del desempleo escondido, llegaríamos a una tasa de desempleo efectiva cercana al 10%.

Las malas noticias no terminan ahí porque el impacto de la llamada Reforma Laboral cambia estructuralmente la tasa de desempleo en Chile. Algo que los economistas llamamos un “aumento de la tasa natural de desempleo”. He leído con mucha atención el trabajo de algunos colegas sobre el impacto de la tecnología y automatización en una innumerable cantidad de oficios que ante la inflexibilidad laboral, van a ser eliminados. Por ejemplo, bastan procesadores de texto con grabación y contestadores de teléfono automáticos para eliminar unas 130 mil secretarias. Esos estudios calculan que podríamos perder 3 millones de empleos por dicho impacto. ¿Vamos a seguir entonces inflexibilizando el mercado laboral y promoviendo con ello el uso de tecnología para sustituirlo?

Creo que ha llegado el momento de que existan cambios en esta materia. Que las nuevas autoridades que dirijan el país desde el próximo año no solo mejoren el crecimiento, con más inversión y productividad, sino que tomen debida nota del tremendo impacto que puede sufrir el desempleo con la combinación de inflexibilidad laboral y tecnología.

 Imprimir Noticia  Enviar Noticia