Cambio de presidentes en el Congreso: la broma que hizo reír a Zaldívar y la emoción de Espinoza

domingo, 26 de marzo de 2017

Reportajes
El Mercurio

"Tiene su fan club, presidente", le gritó un colega al diputado Osvaldo Andrade, en tono de broma, al inicio de la sesión en que el legislador socialista traspasó la presidencia de la Cámara a su par y correligionario Fidel Espinoza, el miércoles de esta semana. "¡Andrade's lovers!", dijo a continuación otro legislador, también en clave de chanza.

Ambos se referían al hecho de que siete diputados opositores acababan de pronunciarse en contra de que Andrade renunciara al cargo y dejará su sillón a Espinoza, cuyo nombre genera reticencias en las bancadas de derecha. Pese a lo cual, finalmente, fue elegido.

6 5 apretones de mano y la "segunda vuelta"

Junto con Espinoza y sin proponérselo, fue también protagonista de la sesión el funcionario de la Cámara que custodiaba la bandeja donde los diputados depositaban sus preferencias: "estoico", estrechó la mano 65 veces a los legisladores que lo saludaban, tras sufragar.

En los hechos, la votación del miércoles tuvo una "segunda vuelta", pues, luego de llamar uno por uno a los 120 diputados, el secretario Miguel Landeros debió convocar a los rezagados, a medida que llegaban a la sala. Así y todo, algunos no alcanzaron a marcar la papeleta y quedaron fuera de la elección.

Una foto en la solapa

Desde las tribunas, el discurso del nuevo presidente fue seguido por su madre, María Sandoval, y una de sus hijas. Durante el acto, Fidel Espinoza llevó prendida en la solapa una foto de su padre: el ex diputado PS Luis Espinoza, ejecutado en 1973.

A Espinoza se le quebró la voz cuando recordó a su papá y describió los esfuerzos que hizo su madre, ya viuda, para mantenerlo a él y a sus hermanos. Su alocución, sin embargo, fue oída solo por una parte de sus colegas, pues casi todos los diputados opositores se retiraron de la sala. De hecho, Andrade le preguntó cuánto duraría su intervención, "para avisar a los que están afuera".

MacArthur y un "joven valor"

El martes, el Senado vivió su propio cambio de mando, cuando Ricardo Lagos Weber (PPD) le entregó la presidencia a Andrés Zaldívar (DC).

"Me voy, pero volveré...", dijo con humor Lagos, parafraseando al general Douglas MacArthur, cuando su sucesor le obsequió una campana, como recuerdo del año en que encabezó la mesa.

El inicio de la sesión lo marcó una broma que hizo el senador Jorge Pizarro (DC): "Vamos a presentar la candidatura (a la mesa) de este joven valor de la política chilena, don Andrés Zaldívar". "Ciertamente constituye un valor, eso está fuera de dudas", le retrucó Lagos Weber, mientras el aludido sonreía.

Zaldívar acaba de cumplir 81 años y su trayectoria política suma ya seis décadas y media.

La "abstención" de Harboe

Ya durante la votación, se vivió un momento tenso, cuando el senador Alejandro Navarro dijo que sufragaba "en contra" de su par DC y de Baldo Prokurica (RN), la carta opositora para encabezar la corporación.

Entonces, Lagos Weber le explicó que solo era posible elegir a alguien o abstenerse, ante lo cual Navarro insistió. Solo después de un tirante diálogo, este último optó por la segunda de las alternativas.

Ya elegido Zaldívar, correspondió escoger al vicepresidente. Durante la votación, Felipe Harboe (PPD) fue blanco de bromas, por el bajo volumen con que pronunció el nombre del postulante oficialista: Guido Girardi (PPD). "¡Más fuerte! Sonó a abstención...", le dijo un colega.