Latam celebra en Brasil y con justa razón. El Consejo Administrativo de Defensa Económica (Cade) autorizó unánimemente el acuerdo comercial ( joint business agreement , JBA) entre Latam y el Grupo IAG, al que pertenecen British Airways e Iberia. Este era uno de los principales objetivos de la aerolínea comandada por las familias Cueto y Amaro, sobre todo considerando que Brasil es el mayor mercado para la compañía. Con la firma del acuerdo, Latam e IAG buscan desarrollar un modelo de negocios conjunto, que incluye compartir ciertos ingresos netos y satisfacer la demanda a través de precios conjuntos. La Superintendencia General del Consejo Administrativo de Defensa Económica de Brasil sostuvo en 2016 que el acuerdo podría generar problemas de competencia, sobre todo en las rutas Sao Paulo-Madrid y Sao Paulo-Londres. Ante ello, el Cade impuso dos condiciones, que estarán vigentes entre siete y diez años. La primera obliga a Latam a abrir dos nuevas rutas entre Brasil y Europa para mejorar la conectividad. La segunda, respecto de la ruta Sao Paulo-Londres, exige a Latam ceder slots a cualquier nuevo actor que desee operar esa ruta. El CEO de Latam Airlines Group, Enrique Cueto, celebró la decisión. "Esta es una muy buena noticia para Brasil y la región, ya que los pasajeros podrán disfrutar de los beneficios de contar con una mejor conectividad, nuevas rutas, mayor competencia y menores precios", afirmó. Desde el grupo aeronáutico europeo también recibieron la determinación con satisfacción. "Demuestra los beneficios que este acuerdo brinda a los pasajeros al proporcionar una mejor conectividad, más destinos y mayores opciones de vuelos entre Europa y Sudamérica", sostuvieron. Frente a la aprobación con restricciones por parte del Cade de Brasil, la Asociación Chilena de Empresas de Turismo (Achet) señaló que las implicancias de esta alianza en Brasil son distintas de lo que se analiza en Chile. Ilustran que, según destacó el mismo Cade en su oportunidad, a 2015 TAM, Iberia y British Airways tenían un 30,6% de participación de mercado en la ruta Brasil-Europa. En Chile, las participaciones de mercado son cercanas al 65% en la ruta Chile-Europa. "Es decir, más del doble de lo que aprobó el Cade. Para el caso de la ruta que va a Norteamérica, la concentración es incluso mayor, casi del 80%", advirtieron. Agregaron que, con esta alianza, no hay ningún beneficio para los consumidores que supere los perjuicios.