La pequeña localidad, distante 285 km al sur de Coyhaique, celebró el fin de semana pasado el aniversario de su fundación con variadas actividades en las turquesas aguas del lago Bertrand, que dan origen al caudaloso río Baker. En el poblado, de casi 300 almas y que recibió a unos 2.500 turistas, la mayoría afuerinos, un campeonato de pesca deportiva dio paso a un asado popular. Lo curioso es que, a falta de acta de fundación o registros, nadie sabe qué número de aniversario celebraban.