El gobierno argentino anunció ayer que entre los años 2018 y 2019 reducirá en 0,5 punto porcentual por mes el impuesto que actualmente rige sobre las exportaciones de granos de soya y de su aceite y harina derivados. Hoy en día, estos productos tienen un gravamen de 30%, por lo que, tras la aplicación del descuento, en diciembre de 2019 su impuesto no superará el 18%.