El té "Ratanpuro" se comercializó en Chile durante las primeras dos décadas del siglo XX. Su origen es londinense, pero el nombre proviene de Ratanpura, una ciudad de la India. Se le recuerda como una marca adelantada para su época, por la forma de llegar al público y de hacer publicidad -como la de las ratas probando el té-, junto con el diseño de sus latas, que incluían parajes alemanes. La compañía estadounidense W. R. Grace & Co. la exportaba e importaba a través de Santiago, Valparaíso y Concepción, además de Callao y Lima (Perú). Esa compañía también mantenía una estrecha relación con la industria del salitre.