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Expondrá en la entrega del Premio Nacional de Medio Ambiente 2016

David Rockefeller Jr.: "Soy optimista de que Hillary Clinton será la próxima Presidenta de Estados Unidos"

domingo, 25 de septiembre de 2016

Constanza Capdevila de la Cerda
Economía y Negocios Domingo
El Mercurio

Filántropo y un apasionado por el medio ambiente y el arte, es el heredero de una de las familias más poderosas de Norteamérica. Llega a Chile el próximo 1 de octubre, para formalizar la puesta en marcha de su fundación Sailors for the Seas.



omo un "gran partidario de Hillary" se define David Rockefeller Jr.

"La conozco hace más de 30 años, como senadora y en su calidad de secretaria de Estado. Soy su gran admirador y sería una fantástica Presidenta", explica al otro lado del teléfono, desde su oficina en el icónico edificio Rockefeller Center, en Nueva York.

Cauto, sencillo y muy amable. Así es el bisnieto de John D. Rockefeller, creador del imperio estadounidense y que formó su fortuna gracias a una serie de aciertos en inversiones petroleras a partir de 1870.

David Rockefeller Jr. es hijo mayor de Margaret McGrath y David Rockefeller Aldrich, magnate banquero y aún patriarca -con 101 años- de una de las familias más poderosas e influyentes en la historia de ese país.

Este próximo 1 de octubre llega a Chile, en lo que será su tercera visita al país. "Mi primer viaje fue en enero de 2010. Navegué a través del Cabo de Hornos, visité a Kris y Douglas Tompkins y conocí el desierto de Atacama", explica.

La segunda vez fue en octubre del año pasado, en el marco de la cumbre "Nuestro Océano" -cuya sede fue Chile- y que contó con la participación de la Presidenta Michelle Bachelet y el secretario de Estado norteamericano, John Kerry".

En esta oportunidad, el motivo de su viaje es lanzar oficialmente el capítulo local de su fundación Sailors for the Seas (Marineros por los Mares), que busca educar y comprometer a la comunidad de navegantes en la protección de los océanos.

Además, la Universidad Católica le entregará un reconocimiento por su contribución en las áreas medioambientales, educación de las artes y filantropía, y será el principal orador en la entrega del Premio Nacional de Medio Ambiente 2016, organizado por la Fundación Recyclápolis, la Pontificia Universidad Católica y "El Mercurio".

Con 75 años, está casado con Susan Cohn Rockefeller y es padre de Ariana y Camilla. Se graduó de la Escuela de Leyes de Harvard y desde siempre ha estado involucrado en los negocios familiares.

En 1991 asumió como presidente de Rockefeller & Co. y hoy es miembro del directorio. Además, se ha desempeñado como presidente del Fondo Familiar Rockefeller y del Fondo Hermanos Rockefeller, entre otras posiciones.

Pero es en el ámbito de las entidades sin fines de lucro donde más feliz se siente. Fue vicepresidente de la Fundación de Parques Nacionales de Estados Unidos y también de la Fundación de Conservación de Alaska. Asimismo, es parte del directorio del Museo de Arte Moderno de Nueva York, que se ubica en una propiedad donada por su familia.

"Trump sería un desastre"

Reacio a entrar en la coyuntura de Chile, Rockefeller aclara: "No estoy bien informado sobre la situación actual, económica o política. Me he dedicado a apreciar las extraordinarias bellezas y recursos naturales de este país y no tengo conocimiento acabado de otros temas".

Donde no tiene problemas en manifestar su opinión es respecto de las próximas elecciones presidenciales en Estados Unidos.

-Independiente de quién gane, ¿qué espera del próximo o próxima Presidente respecto de temas medioambientales?

"Espero cosas muy distintas de parte de cada candidato. Trump será un desastre para el medio ambiente. Hillary continuará con muchos de los programas medioambientales que ha impulsado el Presidente Obama y que han sido muy importantes y positivos".

-¿Y qué pasaría si Donald Trump resulta elegido?

"(Suspira)... Espero que sea un Presidente distinto a lo que ha sido como candidato. De lo contrario, ocasionará muchos problemas en el mundo y eso me preocupa mucho. Sin embargo, estoy optimista de que Hillary Clinton será la ganadora".

-¿Qué anuncios le gustaría escuchar de la boca del próximo Presidente?

"Lo más importante es continuar el énfasis en reducir las emisiones de carbono. Estas no solo acidifican los océanos y contribuyen al calentamiento global, sino que además la velocidad con que estos fenómenos están ocurriendo representa un gran problema. La velocidad del calentamiento es un enorme desafío para la vida en los océanos, para nuestros preciados peces y especies marinas. Eso es lo más importante, ya sea un impuesto al carbono o continuar con regulaciones estrictas a la industria del carbón, petróleo y gas, para minimizar sus emisiones".

-Con toda la polémica generada en torno al estado de salud de Hillary Clinton, ¿tiene Donald Trump alguna posibilidad cierta de ser elegido?

"Hillary Clinton, probablemente, cometió un error al no ser más transparente respecto de su salud. Pero todo lo que leo sugiere que está en perfectas condiciones para ser nuestra Presidenta. De hecho, ha habido menos noticias sobre la obesidad de Donald Trump, y eso nunca es algo positivo para un líder. Nadie es perfecto y nadie va a vivir para siempre, pero Hillary es una candidata excelente y muy saludable".

"Hacer las cosas bien no significa perder dinero"

-¿Cuánto tiempo destina a administrar los negocios familiares, versus la cantidad que dedica a sus actividades filantrópicas?

"Probablemente, 75% filantropía y 25% negocios".

-¿Cómo se entiende que el heredero del "Imperio Rockefeller" dedique tan poco tiempo a sus negocios?

"Por supuesto, no puedes donar recursos si no los produces y es muy importante tener un balance. Tengo 75 años y no aspiro a ser un trabajador a tiempo completo. Muchas personas, a medida que alcanzamos el último capítulo de la vida, queremos estar seguros de que no hemos dejado de hacer lo que más nos importa. Muchas de las cosas que a mí me preocupan e importan más tienen relación con la filantropía y el servicio social, estar en contacto con la naturaleza, con mi familia, visitar museos de arte. Mi mujer, Susan, y yo hacemos mucho por proteger lo que es más preciado para nosotros: la familia, el arte y la naturaleza. Obviamente, necesitas que los negocios funcionen para poder sostener esto, pero afortunadamente tenemos una organización de servicios financieros que invierte en compañías, que cuenta con un equipo excelente, de 125 empleados, y que solo me necesitan en un rol menos protagónico".

-¿Cómo se consigue el equilibrio entre lograr buenos resultados económicos y mantener prácticas sustentables que protejan el medio ambiente?

"Eso es algo muy importante. Cada vez son más las empresas que hoy están preguntándose si están deshaciendo el bien, que significa lograr utilidades, con prácticas no saludables, tanto para los seres humanos como para la naturaleza. Y para ser honesto, si miramos la cadena de proveedores en aquellas compañías dedicadas a la manufactura y elaboración de productos, puede ser fuente de problemas. Tú puedes estar trabajando bien en tu país, acorde con las regulaciones, pero tus proveedores en distintos lugares del mundo tal vez están empleando a menores de edad o contaminando la tierra y los océanos por medio de sus procesos productivos. Debemos preocuparnos de toda la cadena productiva y el público va a exigir con mayor ahínco que las empresas sean responsables. Las empresas que se hagan esta pregunta serán las que tengan éxito".

-¿De qué manera ha impactado el tema medioambiental en los negocios de la familia Rockefeller?

"Por ejemplo, tenemos el Fondo para los Océanos, especializado en el tema y que ha logrado muy buenos resultados. Acabo de ver el reporte sobre nuestros primeros tres años de operaciones y es muy favorable. Hacer las cosas bien no significa perder dinero".

"También, varias de nuestras fundaciones filantrópicas han realizado declaraciones públicas en términos de reducir al mínimo sus inversiones en compañías de combustibles fósiles".

Cada vez son más las empresas que hoy están preguntándose si están deshaciendo el bien, que significa lograr utilidades, con prácticas no saludables tanto para los seres humanos como para la naturaleza".

"Todo lo que leo sugiere que está en perfectas condiciones para ser nuestra Presidenta. De hecho, ha habido menos noticias sobre la obesidad de Donald Trump, y eso nunca es algo positivo para un líder".

"Puedes estar trabajando bien en tu país, acorde con las regulaciones, pero tus proveedores en distintos lugares del mundo tal vez están empleando a menores de edad o contaminando la tierra y los océanos por medio de sus procesos productivos. Debemos preocuparnos de toda la cadena productiva".

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