La mayoría de los perros prefiere un elogio de su dueño antes que un pedazo de carne como recompensa, publica el último número de la revista Social, Cognitive & Affective Neuroscience. Según comprobaron científicos de la Universidad de Emory en Estados Unidos, los 15 animales estudiados -a los que se les midió su actividad cerebral mientras eran felicitados por sus dueños, premiados con comida o no recibían estímulo alguno- se contentaron más con las palabras de los humanos. "Es incluso comparable a lo que sienten las personas cuando alguien las elogia", indicó el investigador Gregory Berns.