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Talleres ayudan a tomar conciencia de los prejuicios que existen sobre esta etapa:

Los adultos mayores empoderados se hacen responsables de sí mismos y de su entorno

lunes, 15 de agosto de 2016

AMALIA TORRES
Vida Ciencia Tecnología
El Mercurio

Hacer valer sus opiniones y sentir que pueden participar en la sociedad como cualquier otra persona es clave, dicen expertas en gerontología y los propios miembros de la tercera edad.



Desde que Gladys Fernández (69) entró a la tercera edad se ha reunido con diputados, seremis, ministros, pero sobre todo con adultos mayores que, como ella, quieren cambiar lo que sucede en su entorno.

Hace dos años, Gladys encabezó la "marcha de los bastones", en la que adultos mayores y otros miembros de la sociedad marcharon buscando una rebaja del pasaje en el transporte público para los que tienen más de 60 años.

"En una reunión mensual en un centro de adulto integral de Providencia al que pertenezco, surgió la idea de ver nuestras necesidades, y la primera de la que se habló fue la rebaja del pasaje. Aunque muchas compañeras se rieron y nos dijeron que íbamos a hacer el loco, el 13 de diciembre de 2014 llegaron, fácil, 800 personas a la marcha".

Hoy ya llevan tres marchas en su historial y en febrero de este año este grupo de adultos mayores organizados logró que Metro extendiera durante todo su horario el pasaje rebajado para los ancianos.

"Nosotros no estamos escondidos y nuestra cabeza está (funcionando) perfectamente bien. El adulto mayor ha cambiado, ya no es el que se queda en la esquina de la casa tejiendo. Ahora el adulto mayor no quiere estar encerrado y eso es bueno también para el Estado, porque si no, rápidamente tiene que hacerse cargo de la enfermedad mental".

Etapa de ganancias

Palabras como las de Gladys Fernández sintetizan lo que Daniela Thumala, del Departamento de Psicología de la U. de Chile e investigadora del Centro de Gerociencia, Salud Mental y Metabolismo, GERO, explica que es una persona empoderada.

"Un adulto mayor empoderado se ve a sí mismo como un sujeto de derecho y no objeto de cuidados. Se siente dueño de su vida, de sus decisiones, hace valer sus opiniones, busca lo que necesita, se da cuenta de que tiene capacidades para participar en instancias de la sociedad como cualquier otra persona y no como alguien que va camino al declive".

Según Thumala, uno de los grandes problemas con los que se enfrentan los mayores es cómo la sociedad ve la vejez. "Todo se reduce a que es una etapa de deterioro. Y por supuesto que hay deterioro, pero puede ocurrir en una etapa más tardía, y no todas las personas tienen demencia. Y en la vejez también se pueden experimentar ganancias".

Y aunque se apura en aclarar que la "sabiduría es escasa en todas las edades", también recuerda que el cúmulo de experiencias "abre la puerta para que haya un desarrollo emocional más complejo".

Experiencias comunes

Con ella coincide María Paz Carvajal, directora del grupo gerontológico "60 y más" y quien imparte el taller "Poder senior: 5 destrezas para influir en el Chile de hoy" en la Municipalidad de Vitacura. "Es necesario deconstruir la imagen social y ayudarlos a que identifiquen cuáles son los estereotipos y cuáles son sus fortalezas, porque la experiencia trae ganancias: hay gente que tiene capacidad de convocar o hay gente que tiene resiliencia, por ejemplo".

Trabajar en un grupo de pares también es clave, ya que permite ver intereses y experiencias comunes. "Vemos que las actitudes por las que alguien se siente discriminado por ser mayor, al de al lado también le ha pasado. Así se toma conciencia de que la imagen que impera ha sido construida desde el prejuicio, y no desde la evidencia, y vamos mejorando la opinión de nosotros mismos", agrega.

Finalmente, es clave desarrollar habilidades y competencias para lograr influir: "Aprender sobre comunicación efectiva, sobre asertividad, que sepan técnicas para resolver conversaciones difíciles, y ponerlo en práctica", puntualiza.

Pero el estar empoderado no solo permite poder expresar sus opiniones de forma asertiva, dice Carvajal. "En la medida que la persona está empoderada es responsable de su proceso de envejecimiento. Y esto logra mayor adherencia a tratamientos, incorpora estilos de vida más saludables y además está más dispuesta a participar en la sociedad. En la medida que haya roles más activos en los adultos mayores, todos ganan".

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