"Si hasta ahora vendo diez mil unidades al mes, para el próximo mes tengo cotizaciones para cien mil", explica el gerente general de Nita, Andrés Villagrán. Diez veces ha crecido la demanda de su empresa de snacks saludables que nació en Valdivia en 2013 para producir rodajas frescas de manzana envasada, galletones y jugos sin azúcar y que por estos días vive un boom por la nueva Ley de Etiquetado de Alimentos. Trasladaron su planta de envasado de fruta fresca a Santiago, para estar más cerca de su mercado. En Valdivia quedó su planta de horneados, donde ya están listos los galletones sin signos "altos en" para vender en colegios. El gerente general de Nita, Andrés Villagrán, anda corriendo entre reunión y reunión. Dice que los pedidos no paran y vienen principalmente de colegios. A ellos les ofrece abastecerse en la distribuidora el Palacio del Confite, que ha aceptado sus productos. Con los supermercados, reconoce que también está empezando a negociar. Es la vorágine de un mercado que está comenzando a desarrollarse impulsado por la ley de etiquetado, que empieza a regir el próximo lunes 27 de junio. Esta reforma hizo poner etiquetas "Altos en" sodio, grasas saturadas, azúcar y calorías en los alimentos envasados y además prohibió vender cualquier producto con este signo en los colegios. El mercado de los snacks se está revolucionando. En Chile somos grandes consumidores de snacks , papas fritas, deshidratados de frutas, chips de tortilla o de maíz, palomitas de maíz, pretzels, nueces y otros aperitivos dulces y salados. De acuerdo a cifras de Euromonitor, entre 2010 y 2015, la venta de estos productos creció 41,5%, mientras que en América Latina aumentó 19,3%. En Estados Unidos, 9,8% y en España, 4,8%. El desarrollo de nuevos alimentos envasados Las frutas picadas con jugo, las compotas en frascos plásticos y en squeeze (envases para apretar) son algunos de los productos que aparecieron hace unos años en la industria como opción de alimentos saludables. Estos se han ido modernizando con nuevas alternativas de sabores para llegar al público joven, por ejemplo, las compotas de frutas que comenzaron vendiéndose para guaguas, ahora agregaron cereales y chía para los jóvenes. Dole produce snacks de frutas desde 2012; son naturales, sin azúcar adicionada y con pequeñas porciones de cereales integrales. Sin harinas blancas, sin miel o jarabes y sin materias grasas saturadas como mantequilla o crema de leche. Además, tienen productos deshidratados, como las manzanas que crujen como una papa frita. Dicen que ha habido un aumento de la demanda en el último tiempo, pero esta no viene de las grandes cadenas de supermercados. "En los supermercados, el efecto es el opuesto, ya que están liquidando los stocks sin los logos y el foco está puesto en cumplir la ley y rotular. Pero estamos entrando en muchos puntos del segmento quioscos que antes no atendíamos; por esto, los números de crecimiento son muy buenos", destacan en Dole. Sus cifras muestran que la venta de todos los productos empacados ha crecido 130% respecto de la misma fecha del año pasado. Las principales alzas están en los potes de fruta con jugo, que en promedio han aumentado 300%, y los productos con jalea, 400%. Por ahora, en la compañía dicen que tienen stock suficiente para hacer frente al aumento de demanda, pero evaluarán el comportamiento para aumentar las frecuencias de los embarques, ya que estos productos son importados. Respecto a la venta de nuevos alimentos saludables, en Dole explican que en el mundo venden productos congelados, barras de cereal, milk shake y frutos secos, que podrían vender en Chile, pero aún lo están evaluando. La firma Mizos partió en 2013 en el rubro de las galletitas de arroz en paquetes individuales, y en el último tiempo ha visto crecer la demanda en supermercados. "La categoría de los productos "sin" está creciendo a dos dígitos y nuestras ventas se duplican o triplican cada año. Creo que la ley del etiquetado va a incidir, hoy en día me llaman los colegios y hay algunos que llegan a la bodega de Cerro Navia a buscar productos, porque hay poca oferta de alimentos saludables", cuenta el gerente general de Mizos, Gonzalo Aspillaga. Hace un tiempo, sacaron al mercado un segundo producto que llamaron "clusters", que son bolitas crujientes de manzana deshidratada, que ya están vendiendo en supermercados y colegios. Importadoras cambian dulces por galletas de arroz Hace tres años, Dulce Locura comenzó a importar desde Europa galletas de arroz dulce, saladas y con chocolate libres de gluten, de la marca Good Food. Luego siguieron fabricando en Chile los Crunchy Rice Rolls, también de arroz con sabor dulce y canela y se preparan para lanzar en julio los integrales. "No llevarán semáforos 'alto en'", explica el gerente de Dulce Locura, Ariel Krichmar. El tema ha sido una revolución en esta empresa que se había centrado en los caramelos para niños, algunos de ellos con figuras de juguete, como los Pez y Hello Kity, que dejó de importar. Optaron por lo sano y, además de las galletas de arroz, están trayendo de Argentina las tabletas de dulce de leche "la Vaquissima", sin gluten ni grasas trans. "Mi función en Dulce Locura para los próximos años es visitar, investigar y explorar ferias de diferentes partes del mundo, en especial Europa y Oriente, en búsqueda de alimentos sanos", explica Krichmar. Aclara que no es fácil dar con alimentos saludables para importar, porque los snacks que se consideran sanos en Estados Unidos, España o Alemania, en Chile pueden llevar hasta uno o dos semáforos "altos en". El problema de la distribución En todas las empresas productoras de alimentos, tanto grandes como pequeñas, explican que la distribución está siendo el tema más complicado. Lo más simple es llegar a los supermercados, que compran una gran cantidad. Pero hoy son los quioscos escolares su principal nicho, que son muchos, están repartidos y hay que abastecerlos en pequeñas cantidades y con más frecuencia. Además, los quioscos se abastecen, principalmente, en las distribuidoras de confites, a las que estos productos sanos no han logrado entrar. "Al ser una empresa chica, no contamos con los canales necesarios, y además, los quioscos de colegios hay que reponerlos con frecuencia", cuenta Andrés Villagrán, de Nita. En Mizos dicen que ellos no tienen manera de distribuir colegio por colegio. "Ellos compran de a poco y a nosotros no nos sale rentable distribuir una caja a un colegio en Chillán", ejemplifica Gonzalo Aspillaga. En Dole también destacan que se están viendo complicados con la logística de distribución. "Se requiere una entrega punto a punto, con baja cantidad de productos de forma muy frecuente. Por esta razón, no estamos llegando a todos los sectores, comunas o zonas del país. Estamos usando la capacidad instalada y tratando de a poco de agregar más puntos de entrega", dicen. La empresa distribuidora Comiendo Sano se formó hace un año y dos meses en Las Condes. Partió distribuyendo líquidos sin azúcar en los Big John, establecimientos que no tienen bodega en sus locales y necesitan una reposición dentro del día y de manera frecuente. Hoy distribuye en 44 puntos de esta cadena, pero ya no piensa crecer más por las tiendas de conveniencia. Su fundador, José Antonio Correa, cuenta que optaron por abastecer a los colegios, impulsados por la ley de etiquetado. A ellos les entregan productos sanos, bebidas y snacks envasados que no requieren refrigeración. "Comenzamos a llamar a los colegios en diciembre del año pasado y hubo cero interés, nadie sabía de qué se trataba la ley. En marzo tampoco hubo mucho interés, y en mayo o junio estaban todos urgidos", cuenta José Antonio Correa. Su hijo, del mismo nombre, tomó a cargo el nicho del quiosco escolar y cuenta que hoy los colegios le piden por favor que vaya y le dan las gracias tras la reunión. "No tenían nada y no sabían qué vender en el recreo a los niños", cuenta José Antonio Correa hijo. Explica que hoy atiende a 15 colegios, entre ellos nombra al Cumbres, Everest, San Benito y Manquehue. Dice que también están en reuniones con Aramark y con los colegios municipales de Las Condes. A ellos les ofrecen un set de unos 15 productos que no necesitan refrigeración, que incluye jugos sin azúcar, aguas, galletas de arroz Mizos, chips de manzana Dole, ciruelas deshidratadas, frutos secos, fruta picada en vasos, fruta en compota, frutos secos, berris y chupón de miel. Quieren ampliar su oferta, y por eso buscan proveedores, pero explican que en Chile hay pocos productos envasados que podrían entrar a los colegios, y los que encuentran están más orientados a la exportación. MIENTRAS productores se esfuerzan por bajar el azúcar, la grasa y el sodio para sacar el "Pare", comienzan a aparecer los distribuidores especializados.