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Sus síntomas son casi imperceptibles para el paciente:

Cerca de la mitad de los infartos cardíacos suelen ser "silenciosos"

martes, 17 de mayo de 2016

S. Urbina
Vida Ciencia Tecnología
El Mercurio

Esto se concluye de un estudio que siguió a casi 9.500 personas y donde se vio que si bien estos ataques son más frecuentes en hombres, es más probable que sean mortales en mujeres.



El clásico dolor en el pecho, con dificultad para respirar y sudoración fría, no siempre se observa en los infartos cardíacos. De hecho, un 45% de estos ataques son "silenciosos", con síntomas casi imperceptibles para el paciente, y cuyo diagnóstico se hace después, cuando el afectado se realiza un electrocardiograma en un chequeo médico de rutina.

Así lo estableció un estudio con 9.498 adultos que fueron seguidos por más de 20 años, el cual demostró que, al igual que los ataques que sí presentan dolor súbito, los "silenciosos" pueden causar la muerte del paciente. "Los resultados del infarto silente son tan malos como los del que es sintomático", dice el doctor Elsayed Soliman, autor del estudio y director de Investigación de Epidemiología Cardiológica del Centro Médico de Wake Forest.

"Y porque el paciente desconoce lo que le está pasando, no recibe finalmente el tratamiento que necesita para prevenir otro infarto", agrega el especialista. Además, se vio que si bien estos infartos son más frecuentes en hombres, causan más muertes en mujeres.

Los resultados de esta investigación se publican en la revista Circulation de la Asociación Americana del Corazón.

Estimación mayor

"Hasta ahora, el infarto silente se estimaba en un 20% del total", dice el doctor Víctor Rossel, cardiólogo de Clínica Indisa.

Según explica, a veces también sucede que "la persona puede sentir una molestia pasajera, pero como no son síntomas tan intensos, no les da importancia".

Respecto del diagnóstico de estos infartos, lo más rápido y accesible es pedir un electrocardiograma. Aunque a veces entrega un diagnóstico categórico, muchas veces solo da una orientación de que pudo producirse un infarto.

En este caso, se pide un ecocardiograma que da un diagnóstico más exacto, "porque se ve el corazón, se ve cómo está funcionando y si hay una zona que se contrae menos", dice el doctor Rossel. Por último, si todavía hay dudas se puede pedir una coronariografía, examen que muestra si están tapadas las arterias del corazón.

Lo que está claro para el doctor Soliman es que, cuando se hace el diagnóstico, "estos infartos deben ser tratados tan agresivamente como los que son sintomáticos". Es decir, indicando medicamentos y estilos de vida saludables.

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