Las ventajas de la cirugía robótica en el tratamiento del cáncer
viernes, 06 de mayo de 2016
Ediciones Especiales
El Mercurio
El da Vinci es un robot de última generación que se utiliza para realizar múltiples procedimientos quirúrgicos en cánceres urológicos, digestivos, pulmonares, ginecológicos y de cabeza y cuello.
El Sistema Quirúrgico da Vinci Xi es una sofisticada plataforma robótica que potencia las capacidades y habilidades del cirujano y ofrece una opción mínimamente invasiva en procedimientos de cirugía compleja mayor. Está indicado para procedimientos de cirugía colorrectal, hepatobiliar, digestiva alta, pulmonar, urológica (próstata, riñón y vejiga), ginecológica y de cabeza y cuello. "La tecnología robótica permite mayor precisión al cirujano y que la intervención sea menos invasiva para el paciente. Gracias a lo anterior es posible preservar la función sexual y la miccional, mejorando su calidad de vida", explica el Dr. Camilo Sandoval, jefe del equipo de Urología del Instituto Oncológico FALP, quien precisa que durante los primeros meses de funcionamiento del robot da Vinci Xi -la última versión disponible en Chile y primera en Latinoamérica- se han realizado más de una decena de intervenciones. El especialista indica que es cada vez más frecuente que los pacientes lleguen a la consulta en etapas iniciales de la enfermedad, lo que favorece un buen pronóstico y una amplia gama de alternativas en materia de tratamiento. Entre ellas se cuentan la radioterapia avanzada, la radiocirugía robótica, la braquiterapia, la vigilancia activa y la cirugía convencional. "En la elección del plan de tratamiento se toman en cuenta las condiciones personales y las expectativas del paciente, se busca personalizar su tratamiento y que tenga menos dolor y posibles hemorragias, además que su recuperación sea mucho más rápida". Con el da Vinci Xi se puede disecar, cortar y tratar enfermedades de manera mucho más exacta y segura, con incisiones mínimas, lo que permite que el paciente tenga menos dolor y su recuperación sea mucho más rápida. En las intervenciones convencionales de próstata, la incisión es de 15 a 20 cm, se requiere de separadores durante horas lo que determina que el dolor permanezca por algunas semanas. Con el robot, en tanto, las heridas son de menos de 1 cm. "Al tener menos dolor, el paciente se reincorpora y camina más tempranamente, lo que hace que mejore su tránsito intestinal y su función respiratoria, todo lo anterior acorta los tiempos de convalecencia". Gracias esta tecnología de precisión, los pacientes pueden esperar que los resultados sean evidentes en menos tiempo. "Generalmente, son personas que bordean los 55 años y que están activos laboralmente, por lo que buscan ausentarse lo menos posible de su trabajo". Ventajas para el paciente Carlos Loyola, paciente intervenido con esta técnica, frecuentemente se efectuaba controles y el año recién pasado visitó al Dr. Sandoval porque tenía muy alto su Antígeno Prostático Específico. "Estaba en 9,4 y en general el rango es de 0-4. Así que tuve que hacerme una biopsia, que confirmó el diagnóstico: cáncer de próstata. Él me habló de los distintos procedimientos a los cuales podía acceder. Uno de ellos fue el robot da Vinci Xi, menos invasivo". En cuanto a los efectos secundarios, una de las grandes preocupaciones que tienen los pacientes operados de esta patología son los que se relacionan con la incontinencia urinaria y la disfunción sexual. Sin embargo, Carlos Loyola comenta que al séptimo día después de la intervención, le sacaron las sondas y no ha sufrido de incontinencia. "Sobre la parte sexual el doctor me indicó dos meses de espera, pero estoy confiado de que todo va a salir bien. Fue como si nunca me hubiera sometido a una cirugía".
