La recomendación normativa de interconexión obligatoria, con calce vinculante y automático entre las distintas bolsas de valores del país que emitió el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC), causó molestia en la Bolsa de Comercio de Santiago (BCS). "El fallo del TDLC indica que su recomendación está sujeta a que se haga un estudio de cuáles son los costos y beneficios de las propuestas que están haciendo. Esto es grave y de una liviandad sorprendente y espantosa de parte de los ministros, excepto por el voto de minoría, que es el único que hace un análisis de este tipo. Se debe recomendar cuando algo es mejor, no cuando no se tiene la seguridad de que algo es bueno. Es una irresponsabilidad que no tiene nombre", expresa una persona relevante dentro de la Bolsa de Comercio. Peligra negocio Pero más allá de la inconformidad con el fallo del TDLC, un aspecto más profundo que preocupa al interior de la principal plaza bursátil del país es que de implementarse la interconexión como lo recomienda el TDLC, bajaría el precio de las acciones de la propiedad de la Bolsa de Comercio, dado el menor atractivo que tendría y por las fugas de algunas corredoras que preferirían operar de manera más barata en otra bolsa. Antes del pronunciamiento del TDLC, desde la Bolsa de Comercio estimaban que con el proceso de desmutualización de la propiedad que están llevando a cabo, los títulos de los propietarios de la BCS iban a subir entre 10% y 27%, dada la mayor liquidez de las acciones cuyo número se multiplicaría de las 48 actuales a 48 millones y donde además ya no será requisito ser corredor de bolsa para ser accionista de la BCS. El principal factor que haría bajar el precio de la acción de la BCS si se interconecta es el valor del peaje que tendría una operación que provenga de otra bolsa, y que según el TDLC lo debería fijar la SVS si el costo marginal de las operaciones interbolsas fuera mayor que cero. "Si el peaje fuera cero, obviamente que va a haber un perjuicio en el valor de la acción. También habría perjuicio si se toma en cuenta el costo marginal y no el costo medio. El marginal indica que el nuevo corredor que opera desde afuera tendrá que pagar casi cero, porque la infraestructura de la BCS ya está instalada, pero obviamente que eso no es justo para los corredores que están instalados en la Bolsa de Comercio y que pagan por igual la plataforma tecnológica para operar", dice un alto ejecutivo de la BCS, quien concluye que si se aplica esta recomendación del TDLC, sería una medida expropiatoria y que "mataría" a la Bolsa de Comercio. El socio y director de la corredora MBI, Germán Guerrero, coincide en que la interconexión como se ha presentado "es una expropiación, y va mucho más allá de bajar el valor de la acción". El ejecutivo añade que "si hacen la interconexión y a las otras bolsas les cobran costos marginales, yo ese mismo día me voy de la BCS y me paso a la Bolsa de Valparaíso. Porque a mí, como miembro de la BCS me están cobrando costo medio y hay una alternativa de operar a costo marginal. Entonces me sale más caro operar en la misma BCS que en otra bolsa". Guerrero puntualiza que si se cobra un costo marginal por transar en la BCS, esta terminaría en quiebra. Juan Muzard, analista externo de Banmerchant Capital, enfatiza que "una integración de las bolsas fomentaría una mayor competencia, terminando con los altos índices de concentración y, por ende, afectando negativamente el valor de la acción de la BCS, y perjudicando a sus inversionistas pasivos -aquellos que son dueños de acciones y que no operan como corredoras-". Hernán Arellano, Head of Equity de Credicorp Capital, dice que "no creo que la interconexión genere flujos adicionales relevantes, dada la preponderancia de la BCS y dado que además ya existen las operaciones interbolsas".
Costo marginal es lo que pide el TDLC se tarifique como peaje de las operaciones interbolsas.