lunes, 14 de marzo de 2016
El Mercurio
El valor varía dependiendo de la complejidad del diseño, su tamaño, la cantidad de colores y la zona del cuerpo en donde se realiza.
Desde hace un par de años que los tatuajes dejaron de ser algo ajeno a la sociedad nacional. Si hace cinco años atrás los chilenos solo conocían un par de personas con estos dibujos, ahora es común ver gente con imágenes estampadas en su piel. Tanto ha crecido la industria del tatuaje en Chile que, incluso, desde hace tres años se realiza la convención más grande de este rubro, conocida como "Expo Tattoo", en la cual participan algunos de los tatuadores más importantes de la escena global. Una de las razones detrás del crecimiento de esta industria se relaciona con la diversificación que ha alcanzado el uso de tatuajes. Según Demian Massip, dueño de Caos Tattoo, la demanda por tatuajes ha subido gracias a que se ha ampliado el rango etario. "Si antes nuestro público más fiel eran las personas de entre 25 años y 35 años, ahora estamos tatuando a jóvenes que son menores de 18 años y adultos de más de 40 años, y eso antes no se veía con tanta frecuencia", asegura el tatuador. Asimismo, comenta que "ahora hay una industria que se encuentra en movimiento, lo que ha generado que la demanda por tatuajes se haya duplicado con respecto a hace cinco años atrás". Desde la industria además comentan que otra de las razones que habría detrás de este crecimiento tendría relación con la gran exposición que se ha hecho de ellos, tanto en la televisión como en la publicidad. "El boom vino con la era de los realities , en donde las personas empezaron a ver que los famosos los usaban sin problema, lo que permitió que la gente también tuviera más información sobre ellos, perdiéndoles el miedo", asegura Sebastián Ruz, dueño del estudio Tatuajes Mas Estudio. Desde los $30 mil Uno de los puntos de los que actualmente se tiene más desconocimiento es en los factores que influyen a la hora de definir el precio de un tatuaje. Para uno de los socios del estudio Inside Tattoo, José Caballero, la diferencia entre los valores depende principalmente del diseño, tamaño y complejidad. "La tarifa de precios se basa principalmente en el tiempo que toma hacer el trabajo; al igual que en todas las profesiones, en esto tienes involucrado tiempo y se debe cobrar de acuerdo a esto", asegura. De esta forma, la tarifa más baja que se puede llegar a pagar por un tatuaje sencillo y pequeño es $30 mil, mientras que un grabado que implique un trabajo de una espalda completa, por ejemplo, puede llegar a costar $150 mil por sesión, tomando en cuenta que puede demorar hasta 10 sesiones terminar el trabajo adecuadamente. Por lo tanto, un tatuaje de este tipo puede llegar a costar $1,5 millones. Otra de las razones que explicarían estos altos costos tiene relación con los materiales que se usan para la elaboración de los tatuajes. Si bien hace unos años atrás era común que los estudios reutilizaran sus materiales, hoy en día eso ya no se permite y todos sus implementos deben ser desechables. Justamente estos detalles dejan en evidencia cómo ha ido avanzando esta industria en el país, donde los tatuadores nacionales han alcanzado un alto nivel de profesionalismo. "Hoy el tatuaje chileno esta súper bien posicionado a nivel mundial. Estamos al mismo nivel que Europa y Estados Unidos", afirma Selso Valenzuela, dueño de For My Friend Tattoo Studio.
