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Las 10 empresas demasiado grandes para caer... que ya no existen

lunes, 25 de enero de 2016

Economía y Negocios Online
El Mundo

¿Hay compañías demasiado grandes para desaparecer? ¿Puede una empresa pasar de dominar el mundo a caer en el más absoluto olvido? La respuesta es sí. No se trata de casos aislados. Aquí van 10 ejemplos de auténticos gigantes que acabaron cayendo por motivos bien distintos.

¿Hay compañías demasiado grandes para desaparecer? ¿Puede una empresa pasar de dominar el mundo a caer en el más absoluto olvido? La respuesta es sí. No se trata de casos aislados. Aquí van 10 ejemplos de auténticos gigantes que acabaron cayendo por motivos bien distintos. Nadie podía imaginar que la icónica aerolínea Pan Am acabaría sucumbiendo ante el terrorismo o que una de las cinco entidades más grandes de España sería hoy apenas un recuerdo; que el fabricante del coche del que se hacían canciones en nuestro país terminaría siendo un nombre desconocido para los jóvenes o que revoluciones digitales no tan lejanas como Napster, llamadas a dar al traste con la industria musical, acabarían doblegando la rodilla hasta su extinción. Lo que parecía imposible se hizo realidad en estos casos. Pero, ¿puede volver a pasar?

Blockbuster, un gigante del alquiler al que internet dejó viejo


En 2004 no tenía rival. Nadie podía competir con sus 9.000 tiendas con más de 60.000 empleados en todo el mundo. Alquilaban viodeojuegos y películas. Y todo pasaba por Blockbuster. Nacieron en 1985 en el estado norteamericano de Texas y crecieron como la espuma. En dos años, ya tenían 17 tiendas en EEUU. En 1993, llegaban a 3.000. Su expansión era tan imparable que en 1994 Viacom llegó a pagar 8.400 millones de dólares por ella. Era una inversión segura, o eso pensaban... hasta que todo se torció. Intentó adaptarse al futuro, pero no tuvo éxito. Primero puso en marcha un ambicioso plan de suscripción por correo, pero la gente ya le estaba cogiendo el gusto a recurrir a su ordenador para ver películas. Luego puso en marcha un plan de suscripción vía streaming, pero tampoco pudo competir con los precios que ya ofrecían plataformas como Netflix o Redbox. Dish se hizo en 2011 con Blockbuster por sólo 223 millones. En 2013, el gigante del alquiler cerró su última tienda.

Pan Am, la icónica aerolínea que sucumbió al terrorismo


Quienes la usaron por primera vez dejaron dicho que nunca habían disfrutado de nada ni remotamente parecido. Pan American World Airways, popularmente conocida como Pan Am, se fundó en 1927 y llegó a ser una de las marcas más reconocibles e icónicas de Estados Unidos. Hoy la recordamos gracias a películas o series que dan una muestra del esplendor que tuvo esta aerolínea, con largas y novedosas rutas para la época y un trato exquisito en sus cabinas. Los jóvenes americanos soñaban con ser pilotos o azafatas de Pan Am. Pero nada dura para siempre. Numerosas crisis energéticas y estratégicas azotaron a la compañía pero fue precisamente su icónica imagen lo que le hizo ser el blanco perfecto para los terroristas. El atentado sufrido cuando sobrevolaba Lockerbie (Reino Unido) en diciembre de 1988 y en el que murieron 259 personas fue uno de los detonantes de su caída. Desapareció en 1991 y aunque ha habido varios intentos de resucitarla, ninguno ha prosperado.

Enron, de "compañía del año" a sinónimo de fraude empresarial


¿Puede una multinacional que cotiza a 90 dólares desplomarse hasta los 30 en cuestión de semanas? ¿Puede una empresa de renombre mundial y que emplea a más de 21.000 trabajadores en todo el planeta reducirse a cenizas en menos de un año? Enron lo consiguió. Nacida en 1985 fruto de la fusión de dos modestas empresas que se dedicaban al sector del gas en EEUU, Enron creció tanto que la revista Fortune la eligió durante cinco años consecutivos (1996 y 2000) como la empresa más innovadora del país. Y hasta ahí llegó. En 2000 empezó a zozobrar hasta hundirse en la bancarrota en diciembre de 2001, apenas un año después. Primero llegaron los rumores que la relacionaban con sobornos y tráfico de influencias para conseguir contratos en Latinoamérica, África o la India. Y luego los que certificaron su maquillaje contable y cómo sus beneficios se lograban con negocios de sus propias subsidiarias. Su nombre hoy es sinónimo de fraude.

Napster, la revolución de la música compartida que se topó con el juez


No tenía nada que ver con España, pero su nombre estaba relacionado con una costumbre muy nuestra. A uno de sus dos creadores, Shawn Fanning, le gustaba echarse la siesta (nap en inglés) y así se bautizó a la criatura. Supuso una revolución. Napster permitía compartir de forma sencilla archivos MP3 entre varias personas. De tal manera que uno podía compartir canciones sujetas a derechos de autor de forma gratuita con otros usuarios. Si el servicio se lanzó en junio de 1999, en diciembre de ese mismo año ya había sido denunciado por varias discográficas. Este proceso concedió a Napster una publicidad gratuita impagable que le llevó a alcanzar su cénit, con 26,4 millones de usuarios en febrero de 2001. Pero poco duró su alegría. En julio de ese mismo año, un juez ordenó el cierre de sus servidores y Napster tuvo que indemnizar a las discográficas con 36 millones de dólares. En 2002, otro juez paralizó su venta a la alemana Bertelsmann por 85 millones.

Concorde, el avión más seguro del mundo... hasta que dejó de serlo


Estaba considerado una auténtica maravilla de la ingeniería. Era un avión supersónico que se probó por primera vez en 1969 y que realizó su primer vuelo comercial en 1976. Revolucionó los tiempos. Así, si un avión comercial tradicional cubría la distancia París-Nueva York en unas ocho horas, el Concorde hacía lo propio en poco más de tres horas y media. Francia y Reino Unido, que colaboraron en su construcción, no quisieron dejar pasar la oportunidad. Air France adquirió siete de estos aviones y British Airways, otros tantos. Era considerado el avión más seguro del mundo. En julio de 2000, un Concorde de Air France se estrelló en la localidad francesa de Gonesse provocando 113 muertes. Los vuelos se retomaron en noviembre de 2001, pero ya nada fue igual. El impacto del accidente hizo mella en los pasajeros, que disminuyeron drásticamente. También los atentados del 11-S y el alto coste de mantenimiento de los aparatos. El Concorde se retiró en 2003.

Galerías Preciados, los primeros grandes almacenes de España


Muchos de quienes hoy cruzan las puertas de la Fnac en la mítica calle Preciados de Madrid quizá no saben que ese edificio vio nacer a un gigante del retail y la distribución en España. Cuando Pepín Fernández, un emigrante, volvió de Cuba en 1934 tenía en la cabeza levantar unos grandes almacenes como los que allí había conocido, llamados El Encanto, en los que estuvo trabajando. En España no existía nada parecido. Y el sueño empezó a hacerse realidad en 1943, con la apertura de una sastrería que terminó convirtiéndose en 1968 en Galerías Preciados, los primeros grandes almacenes de España. Su caída fue tan sonada como agónica. La deuda que acumuló en su expansión hizo que acabara en manos del Banco Urquijo. Más tarde, en las de José María Ruiz Mateos, el grupo venezolano Cisneros, la británica Mountleigh... Un grupo de inversores acabó llevándola a la suspensión de pagos en 1994. En 1995 se completó su absorción por El Corte Inglés.

Barreiros, el fabricante de coches en los que era muy difícil hacer el amor


Empezó con la concesión de una línea de autobuses entre Orense y la cercana localidad Luintra y acabó siendo la filial de Chrysler en España. En 1925 el padre de Eduardo Barreiros compró un autobús tras la concesión de esta línea de transporte. La Guerra Civil llevó sus líneas al traste y la familia terminó abriendo un modesto taller para reparar camiones y tractores. En 1949 Eduardo Barreiros compezó a transformar motores de gasolina a diésel en el taller familiar, que acabó transformándose en una gran industria. Al principio fabricaban sólo motores. Luego llegaron los camiones, los autobuses, los tractores, las furgonetas. Su marca era muy conocida en el país. En la década de los 60 fabricaban tantos camiones como Pegaso. Se alió con Chrysler y de sus fábricas salió, por ejemplo, el mítico Simca 1000 o los Dodge españoles. Llegó a tener 25.000 empleados. La familia Barreiros salió de la emprea en 1970. En 1978 la marca desapareció.

Banesto, de estar entre las cinco entidades más grandes a la extinción


El Banco Español de Crédito (Banesto) nació en 1902. Lo hizo sólo con 20 millones de pesetas de capital social. Y pronto se hizo un hueco en nuestra sociedad. El banco llegó a protagonizar cerca de 30 procesos de fusión a lo largo de su historia, integrando bajo sus siglas a otras entidades de la época como el Banco de Oviedo, el de Burgos, el comercial de Valencia, la Banca Coca, el Banco de Vitoria, Garrigues Nogues... Llegó a tener más de 2.000 oficinas repartidas por todo el país y estaba entre las cinco entidades más grandes de España. Crecía sin parar. Pero todo se torció en 1993, el banco fue intervenido por el Estado, su consejo de administración destituido y su entonces presidente, Mario Conde, llegó a ir a la cárcel por su gestión de la entidad. Un año más tarde, el Banco Santander adquirió Banesto e se inició un proceso de integración que culminó en 2013 con su extinción oficial.

Olivetti, la máquina de escribir que no pudo adaptarse al ordenador


Una de las cosas que más ha cambiado a lo largo de la historia es la forma en la que escribimos. Que se lo digan a esta empresa italiana que se fundó en 1908 con apenas 20 empleados en las afueras de Turín. Fabricaba máquinas de escribir. Bastante buenas, parece. Su fama se extendió rápidamente por el mundo. Y creció igual de deprisa. Nunca se quedó quieta. Se enfrascó en la fabricación de calculadoras eléctricas y en 1959 hizo realidad el primer ordenador italiano. Adriano Olivetti, fundador de la compañía, murió en 1960. Pero la empresa siguió a paso firme con su carrera informática. En 1982 sacó al mercado el primer ordenador personal europeo, el M20. Y luego otros muchos. En 1990 se metió en el mundo de las telecomunicaciones. Primero llegaron los ratones, luego las disqueteras... cada vez aparecían nuevos avances que resultaban más caros de producir que de comprar. El avance tecnológico acabó con su aventura industrial.

Lehman Brothers, el coloso que sobrevivió a casi todo... menos a las "subprime"


Todos tenemos este nombre en la cabeza. Es el sinónimo perfecto de la crisis que acabamos de vivir. Que aún vivimos. Pero no todos tienen claro qué era Lehman Brothers y por qué su caída en 2008 ha sido tan importante. Fundada en 1850, especializada en banca de inversión y gestión de activos financieros, Lehman Brothers sobrevivió a la guerra civil estadounidense, a la gran crisis bancaria de 1907, al crash bursátil del 29... pero no consiguió sobrevivir a la crisis de las hipotecas subprime o hipotecas basura que le llevó a la quiebra en 2008 y que ha hecho tambalear los cimientos económicos del mundo. Empleaba a 26.200 personas en todo el planeta y ha sido la mayor quiebra de la Historia, con un pasivo de 613.000 millones de dólares. Algo que Henry, Emanuel y Mayer Lehman, los hijos de un comerciante de ganado que emigró a EE.UU. desde Baviera (Alemania) en 1844, podrían haber imaginado jamás.

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