lunes, 07 de agosto de 2006
Economía y Negocios, El Mercurio
Este segundo semestre serán lanzados al mercado nuevos proyectos como Santa Elena en el que participa Hernan Somerville y Urbanya, de los Yaconi-Santa Cruz.
Inversiones por US$ 13 mil millones son las que se prevén dentro de los próximos 15 años en los dos grandes polos de desarrollo inmobiliario del Gran Santiago: Pudahuel y el acceso norte a la capital.
Según un estudio de Fuenzalida Desarrolladores Inmobiliarios (FDI), ambas zonas corresponden a los pocos grandes paños de terreno que quedan disponibles.
El primer gran foco es el sector del Valle Lo Aguirre. Según explica Rodrigo Fuenzalida, gerente general de FDI, en el sector de Pudahuel y hasta el túnel Lo Prado se están desarrollando varios proyectos de gran envergadura. Ciudad de los Valles, del grupo González-Abalos, fue el pionero. A punto de salir se encuentra Urbanya, de los Yaconi-Santa Cruz, que en un terreno de 700 hectáreas invertirán aproximadamente US$ 250 millones; la expansión de Enea y el proyecto Praderas, en el que participan el grupo Hurtado Vicuña y Cruzat. Según explica Alejandro Magni, gerente general de El Bosque, sociedad a cargo del proyecto, Pudahuel es una zona que hace años está identificada como de desarrollo urbano prioritario por no tener condiciones agrícolas. Praderas, que está siendo desarrollado bajo la normativa de Proyecto de Desarrollo Urbano Condicionado (PDUC), contempla la construcción de 30 mil viviendas en un plazo de 30 años y es el más grande que se construye en el sector.
¿Por qué Pudahuel? Según explica Fuenzalida, porque es una zona destinada principalmente a un sector socioeconómico que actualmente habita en Maipú, el centro o Quilicura, por lo que no significa un gran alejamiento y tienen acceso expedito al resto de la ciudad a través de las autopistas.
Es precisamente esto lo que no ha funcionado bien en Chicureo, el segundo polo de desarrollo de los próximos 15 años, aunque Fuenzalida asegura que el problema se está solucionando con mejores accesos como la radial de Vespucio. En esa zona existen cuatro grandes proyectos importantes, como Piedra Roja, La Reserva, Valle Norte y Las Brisas de Chicureo.
A estos se sumaría a fines de año el proyecto Santa Elena,que está siendo desarrollado por Patricio Abalos y otros socios entre los que está el presidente de la CPC, Hernán Somerville. El proyecto que se ubica entre la carretera San martín y la 5 Norte apuesta al sector ABC 1, pero con viviendas un poco más económicas que las de Chicureo.
Por último, está la zona ubicada en la Panamericana Norte. Ya hay en desarrollo proyectos emblemáticos como ValleGrande, de Novaterra, Larapinta, de Socovesa y otras como El Alfalfal, de Francisco Pérez Yoma. Todos estos proyectos se verán beneficiados por el tren hacia el norte.
¿Y el sur?
A diferencia del sector norponiente de la capital, el desarrollo inmobiliario hacia el sur es prácticamente nulo. Esto, porque según explica Fuenzalida, se trata en su mayoría de terrenos agrícolas, y por lo tanto de un valor mucho mayor como para poder desarrollar grandes proyectos. Salvo casos aislados como lo que Besalco desarrolla en la mestranza de Ferrocarriles, en San Bernardo, los proyectos que se llevan a cabo son muy pequeños, y no conforman una tendencia marcada.
