Universidad de Chile no se fija en gastos. Al menos eso se desprende de los millonarios montos que destina para mantener a algunas de las principales figuras del plantel, como Gustavo Canales, José Rojas y Johnny Herrera.
La semana pasada salió a la luz un correo electrónico enviado por el director de Azul Azul Peter Hiller al resto de la mesa, donde cuestionaba —en junio de 2014— el fichaje de Canales, por significarle a la S.A. un costo de 2 millones 400 mil dólares por dos años de contrato. El empresario hablaba entonces de una “fiesta del despilfarro”.
Sin embargo, el atacante no es el único alto precio de la U. El capitán Rojas y el arquero Herrera, los principales referentes del plantel, también firmaron contratos millonarios. Los tres tienen un denominador común: a su sueldo líquido se le suman una serie de bonos, los que permiten que cada uno de sus ingresos totales se eleven por sobre los 30 millones de pesos mensuales e, incluso, hasta $40 millones.
Los plus de Canales
En el caso del atacante, su sueldo mensual asciende a US$ 26 mil, pero a eso agrega suplementos por usar la vestimenta oficial, por ir a conferencias de prensa y por arriendo de vivienda (US$ 2 mil mensuales cada uno) y cinco bonos más a lo largo de los dos años de contrato por 135.556 dólares cada uno. Es decir, US$60 mil mensuales. A eso se suma el costo de la amortización del pase, equivalente a US$40 mil mensuales. Con los impuestos, el contrato del argentino-chileno tiene un costo para Azul Azul de 2 millones 400 mil dólares por los dos años de contrato.
Rojas y Herrera
En cuanto a “Pepe” Rojas, su ingreso mensual asciende a US$ 25 mil, pero a eso agrega cuatro bonificaciones al año por US$120 mil dólares cada una. Es decir, el total es de 780 mil dólares, o 65 mil dólares mensuales.
En cuanto al arquero, su salario líquido también es de US$25 mil cada 30 días, pero negoció cuatro bonificaciones al año, de US$65 mil cada una. O sea, su ganancia anual llega a 560 mil dólares (47 mil dólares mensuales).
Solo el sueldo
En otro grupo están los jugadores que solo reciben su salario, como Ramón Fernández, Gustavo Lorenzetti, Leandro Benegas, César Cortés, Cristián Suárez y Sebastián Martínez. Fernández, por ejemplo, percibe anualmente US$ 264 mil; Lorenzetti, US$216 mil; Suárez, US$168 mil, y Martínez, US$120 mil. Eso sí, todo el plantel, sin distingo alguno, accede a premios por metas y títulos.
Por otro lado, la contratación del uruguayo Maxi Rodríguez significó para la U un desembolso de 360 mil dólares por cinco meses.
“El Mercurio” intentó contactar al presidente de Azul Azul, Carlos Heller, pero la gerencia de comunicaciones respondió que “por política institucional, no hablamos estos temas (monetarios) a través de la prensa”.