miércoles, 06 de agosto de 2014
Nicolás Marticorena
Economía y negocios
La sorpresa negativa respecto al crecimiento de la economía chilena en junio provocó una reacción importante en la cotización del dólar frente al peso, que se trasuntó en un salto de la divisa estadounidense de $5,3 hasta los $577,2.
El último valor de la moneda extranjera es el más alto desde el 1 de mayo de 2009 —cuando el dólar se transaba en niveles superiores a $580—, y, según los expertos, refleja un nuevo escenario respecto a la tendencia de mediano plazo. El mercado espera ahora que la divisa del país norteamericano siga escalando, llegando eventualmente a cerca de $600 hacia fines de año.
La razón de estas expectativas se debe a las maniobras futuras que deberá efectuar el Banco Central para reactivar la actividad nacional, pues se espera que sus acciones debiliten al peso.
“En este contexto de menor crecimiento y debilidad en las expectativas, ratificamos nuestra visión de una nueva reducción en la tasa de interés en agosto de 25 puntos base por parte del Banco Central de Chile a 3,5%, y creemos que en los próximos meses será necesario incorporar dos nuevas bajas de tasas adicionales para dejar los tipos en el 3% a fines de año”, explica Sergio Tricio, jefe del departamento de estudios de Forex Chile.
Gloria Soto, operadora experta en dólar de FXCMChile, coincide en que la trayectoria de la moneda estadounidense seguirá fortaleciéndose, “tal como ha ocurrido a nivel global frente a otras divisas emergentes”. Y agrega: “Va a seguir la tendencia sobre los $580, y esperamos que cierre el año en niveles cercanos a $600”.
Otro elemento que podría profundizar el alza del dólar en el corto plazo es la inflación, según explica Alexis Osses, jefe de estudios de xDirect.
“Creemos que el dato más influyente seguirá siendo el dato de IPC, ya que si este dato es menor a lo esperado (0,2%), veremos depreciación de la moneda con movimientos extremos durante las próximas semanas”, apunta Osses.
Osses dice que una vez traspasados los $577, el dólar podría llegar incluso hasta los $594 fácilmente, “pero esta alza debiera venir acompañada de un menor IPC y una desaceleración mayor en el Imacec”, contrapone.
Un factor adicional que ha presionado al dólar al alza es la debilidad que ha experimentado el precio del cobre, que a lo largo del año se ha mantenido en niveles de US$ 3,2 la libra.
Ayer, el precio del mineral que se cotiza en la Bolsa de Metales de Londres bajó marginalmente 0,05% hasta los US$ 3,22. La reducción se da tras los datos que mostraron que el crecimiento del sector de servicios de China se desaceleró y alcanzó su peor nivel en casi nueve.
