jueves, 26 de diciembre de 2013
Marina Alías
Economía y Negocios
La acción colectiva busca probar que el organismo estatal actuó de forma “arbitraria y discriminatoria” al cobrar a las firmas un impuesto del 35% que afecta a los servicios facturados en el extranjero, más multas, intereses y reajustes.
El presidente de la Asociación de Emprendedores de Chile (Asech), Juan Pablo Swett, junto con el director ejecutivo de la misma, Cristián López, y otros 13 demandantes, comparecerán hoy jueves en tribunales para presentar una demanda de Nulidad de Derecho Público en contra del Servicio de Impuestos Internos (SII).
El motivo es el cobro del 35% de impuesto sobre el pago por contratar Google AdWords, servicio que ofrece la compañía de Mountain View y que permite a las empresas publicitar en el buscador, cobrando por cada click efectuado.
Según explican desde Asech, esta acción colectiva busca probar que el SII actuó de manera arbitraria y discriminatoria con las empresas a las que fiscalizó —algunas incluso embargadas— y anular el proceso de cobranza iniciado este año.
De acuerdo a los demandantes, la acción se llevaría a cabo tras cinco meses de trabajo con el estudio de abogados Phillippi y bajo los estándares de la OCDE, los que consideran vulnerados por el Estado chileno, en desmedro de los emprendedores chilenos.
Claves del caso
En septiembre de 2012, el Servicio de Impuestos Internos (SII) pidió a Google Inc. la entrega de información referida a los pagos por contratar el servicio Google AdWords, realizados por parte de clientes domiciliados o residentes en Chile y correspondientes al período 2010-2012.
Así, el organismo estatal comenzó a cobrar a las empresas un impuesto del 35% que afecta a los servicios facturados en el extranjero, más multas, intereses y reajuste.
Según Asech, las 200 empresas afectadas aseguran que desconocían la aplicación de este gravamen, el que tampoco fue clarificado por Google o el SII. De hecho, ya la solicitud de información a la empresa en Estados Unidos no les pareció adecuada a las chilenas afectadas, pues, aseguran, muchas trabajaban con la subsidiaria de Google en Argentina.
“Hay pagos que van desde los $10 millones hasta los $1.500 millones, incluyendo multas, deuda e intereses por atraso. Estas cifras podrían hacer quebrar a más de cuarenta empresas nacionales, en su mayoría pymes”, explica.
Además, señala que de acuerdo con lo estipulado por el artículo 52 de la Ley de la Renta, este impuesto afectaría a cualquier servicio facturado en el extranjero, por lo que si el proceso de fiscalización continúa, podría perjudicar a cerca de un millón de empresas y a los usuarios de aplicaciones y software como las archiconocidas WhatsApp, Dropbox, iTunes y Netflix.
“Antes de presentar la demanda hemos tratado de solucionar este tema solicitando reuniones con las autoridades correspondientes. Si bien, hubo buena disposición por parte del Ministerio de Economía, faltó disposición de Tesorería y Hacienda, autoridades con la potestad para actuar sobre esta materia”, afirma Swett.
Agrega que se trata de un impuesto “absurdo y discriminatorio” que atenta contra la competitividad del país. “No era de conocimiento público y cuando el SII envió las notificaciones no solo consideró este año, sino 2010 y 2012. La Asech no pide que desaparezca, pero sí que no sea de carácter retroactivo y que la retención sea en torno al 10%, no un 35%, que es lo máximo que se puede cobrar”, considera Swett.
La Asech asegura que Google firmó acuerdos con las grandes empresas: “por cada US$ 100 de publicidad que pagaban a Google, estas podían retenerle el 35% del impuesto, siempre y cuando le acreditaran que iba al SII y el 65% iba a Google. Así se dejaba en desventaja a las pequeñas empresas. En paralelo, en enero y febrero, Google llegó a acuerdo con algunas empresas más pequeñas para los pagos a futuro”.
