domingo, 31 de marzo de 2013
Alejandro Sáez y Miriam Leiva
Economía y Negocios
Conoció a la ahora candidata cuando ella era ministra de Salud, fue uno de los que le sugirieron incluir en el programa de 2005 la reforma previsional y colaboró con Camilo Escalona en las medidas legislativas luego de la crisis de los "sobresueldos".
Unas cuatro veces estuvo detenido Alberto Arenas (casado, 47 años) en las protestas estudiantiles de la Facultad de Economía de la Universidad de Chile a mediados de los ochenta. Era militante de las Juventudes Comunistas y vicepresidente del centro de alumnos de su carrera, presidido en aquella época por el democratacristiano Álvaro Clarke. Eran años duros, y como dirigentes estudiantiles salieron a demostrar su rechazo al régimen de Pinochet.
Arenas, hoy académico de la Universidad de Chile y director de Canal 13, no fuma, no toma y cultiva un perfil bastante bajo. Pero dista de ir por la vida como un "mateo" preocupado solo de los fríos números, que maneja al revés y al derecho, como le demandó el ser director de Presupuestos de Michelle Bachelet.
"Es muy apasionado con su trabajo", describe Carmelo Mesa-Lago, una celebridad en el estudio de la seguridad social a nivel mundial y mentor de Arenas en la Universidad de Pittsburgh, en Pennsylvania, donde el economista chileno hizo su doctorado
"Tiene habilidades políticas bastante desarrolladas", asevera otro profesional que trabajó con él en la Dirección de Presupuestos. "Ya en la época de la universidad era un excelente negociador. Desde los puntos que debería contener un programa del centro de alumnos hasta cómo organizar una protesta", opina alguien de aquellos años. "Partió en las Juventudes Comunistas, siguió en el Partido Socialista, con una veta más cercana a la Democracia Cristiana, y ahora, creo, es derechamente un socialdemócrata", estima otro economista que estuvo con él en el Gobierno.
Este egresado del Liceo Manuel de Salas, colocolino y futbolista por hobby -que ahora lo practica poco, dicen- es, según muchas fuentes del mundo político, parte del círculo de hierro de Bachelet, quien esta semana aterrizó en Chile y oficializó que sería candidata en las próximas elecciones presidenciales.
Se le atribuye a Arenas un rol preponderante en los ejes programáticos que está definiendo la ex Presidenta, en especial en el área económica, y por esa tarea muchos lo consideran como un candidato serio a ser el futuro ministro de Hacienda, de ganar la ex Mandataria.
"Sus lazos con Bachelet datan desde la época en que ella fue ministra de Salud de Ricardo Lagos y cuando él era subdirector de Presupuestos", asegura otro de sus conocidos. Y como hombre de Camilo Escalona, ha tendido así otro puente hacia Bachelet. El mismo Arenas relata en su libro "Historia de la Reforma Previsional Chilena" -publicado en abril de 2010, cuyo prólogo y presentación los hizo en esa fecha la ex Presidenta- que tanto él como Mario Marcel conformaron un estrecho equipo de trabajo con Escalona cuando se crearon el sistema de Alta Dirección Pública y la Ley de Transparencia, después del escándalo de los "sobresueldos" bajo el gobierno de Ricardo Lagos.
El "padre" no reconocido de la reforma previsional
Arenas llegó a la Dirección de Presupuestos en 1991. Estaba trabajando en esa repartición cuando la Universidad de Pittsburgh le concedió una de sus becas para realizar el doctorado en economía, con la recomendación de Carmelo Mesa-Lago y compitiendo con aspirantes de todo el mundo por el mismo beneficio.
El interés de Arenas era especializarse en seguridad social y más específicamente en los sistemas de pensiones, tema del que versó su tesis doctoral. Pittsburgh es una universidad a la que han ido muy pocos chilenos. Arenas la escogió porque contaba con un fuerte departamento latinoamericano y de seguridad social. Mesa-Lago afirma que ha sido uno de los alumnos que más rápidamente terminaron sus estudios de posgrado.
Ya desde la universidad pasaba por la mente de Arenas la necesidad de promover una reforma al sistema de pensiones chileno, idea que siguió en su mente al volver a la Dirección de Presupuestos después de su doctorado. Él y Marcel -con el puente político de Escalona- le mostraron a Bachelet candidata de 2005 la conveniencia de llevar adelante un cambio de esa naturaleza. Bachelet terminó por convencerse cuando vio en terreno lo importante que este tema era para las personas, lo que permitió que lo incorporara como uno de los ejes prioritarios de su gobierno.
Arenas dice en su libro que fueron él y el ministro de Hacienda, Andrés Velasco, quienes sugirieron el nombre de Mario Marcel para que encabezara el consejo transversal que asesoraría en la reforma del sistema de pensiones. La iniciativa fue conocida como la Comisión Marcel, y para efectos del ciudadano promedio la reforma a las pensiones es una obra articulada por Marcel. Arenas describe en su libro numerosos hechos en los que él fue un protagonista importante, en especial desde la secretaría ejecutiva del consejo de ministros que aterrizó las recomendaciones de la Comisión Marcel en un proyecto de ley.
Osvaldo Larrañaga y Dante Contreras, al editar un libro para el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), calificaron a la reforma previsional como uno de los cambios más exitosos de la Concertación. Lo mismo que estudios realizados a nivel internacional que reconocieron la reforma al sistema de pensiones chileno como una de las más fructíferas del mundo.
Así, Alberto Arenas y Mario Marcel comparten el haber contribuido a uno de los logros más celebrados en materia de seguridad social durante el gobierno de Bachelet.
El otro hombre de la candidata: Mario Marcel Mario Marcel es amigo de Alberto Arenas y sus vidas tienen muchos paralelos: ambos estudiaron en colegios públicos, fueron directores de Presupuesto y se transformaron en piezas clave en el diseño de la reforma previsional de Bachelet. Ambos son socialistas. Ahora, los unen de nuevo las versiones de que uno de los dos podría ser ministro de Hacienda si gana Bachelet.
Fuentes políticas cuentan que Marcel se ha reunido a puertas cerradas con Bachelet en Europa, y que -de ser elegida la ex Mandataria- tiene una buena chance para ocupar la poderosa cartera de las finanzas públicas. Pero esa es una carrera que recién se está corriendo.
Marcel habría estado a un paso de llegar al ministerio de Hacienda en 2006, cargo que asumió Andrés Velasco. Sin embargo, no se quedó con las manos vacías en el gobierno de Michelle Bachelet: asumió la visible labor de presidir la comisión asesora en la reforma de pensiones.
En su prueba de ingreso al Instituto Nacional, Marcel fue el primero entre 1.600 postulantes, y terminó sus estudios como el primero de su generación también. Se tituló de economista de la Universidad de Chile, donde desarrolló también otro de sus pasatiempos, que era el cómic. Hizo un posgrado en Cambridge.
Marcel ha participado en distintas instancias en los gobiernos de la Concertación: reforma del Estado; reforma educacional en el gobierno de Eduardo Frei y diseño -junto a Eyzaguirre- de la regla de superávit estructural, que es hoy una de las joyas macroeconómicas de Chile. Además, el consejo asesor de la reforma previsional terminó llamándose popularmente como la Comisión Marcel, y ahí él ganó varios puntos ante la opinión pública, los analistas y también los inversionistas.
