El streaming y la responsabilidad social dominan en la producción de videojuegos
lunes, 25 de marzo de 2019
Benjamín Cruz Pacheco
Vida Ciencia Tecnología
El Mercurio
En la reciente Game Developers Conference 2019, el lanzamiento de nuevas plataformas de juego en línea y la reflexión sobre cómo incluir a las mujeres y minorías fueron el plato fuerte.
Fue una semana de sorpresas para el mundo de los videojuegos. Entre el lunes y viernes pasado se desarrolló en San Francisco la Game Developers Conference 2019, el mayor encuentro enfocado en los productores de esta industria. El plato fuerte del evento fueron los servicios de streaming . El martes, Google anunció su nueva plataforma Stadia, y el jueves Microsoft hizo lo mismo con su servicio xCloud. Similares a lo que hace Netflix con las películas, los servicios de streaming no requieren que los videojuegos sean descargados en el computador, pues se puede acceder a una biblioteca completa de ellos solo con conexión a internet. A pesar de que ya existen plataformas de esta naturaleza, como PlayStation Now de Sony, ninguna ha tenido gran éxito en el rubro. En el caso de Stadia, Google realizó demostraciones durante el evento, permitiendo al público experimentar de primera mano cómo rendía la plataforma en dispositivos como computadores, teléfonos y tabletas. Microsoft, por su parte, no realizó demostraciones del xCloud, pero sí explicó que el principal enfoque del servicio sería la jugabilidad en teléfonos celulares. Aunque el avance del streaming en los videojuegos podría terminar con el costo de fabricar consolas, hay quienes tienen ciertas reservas al respecto. José Miguel Villegas, diseñador de videojuegos en Iron Galaxy Studios, cree que este formato amenaza la conservación: "¿Qué va a pasar cuando se caiga la página de Stadia? ¿El juego va a dejar de existir para siempre? La falta de soporte físico impide que podamos preservar estas creaciones", argumenta. José Miguel Pumpin, diseñador del estudio Quiet Games, cree que es difícil que los sistemas funcionen correctamente a nivel global: "Se requiere mucho poder de procesamiento, sobre todo para juegos de multijugador, pero si alguien tiene los servidores para hacerlo es Google". Representación de minorías Pero no todo se trata de tecnología. La conferencia ha tenido un fuerte énfasis en la responsabilidad social que la industria quiere adoptar. "En varias actividades nos hemos hecho la misma pregunta: ¿Cómo podemos los desarrolladores alejarnos de prácticas manipuladoras?", cuenta Villegas. Esta reflexión surgió a partir de la controversia que han generado los sistemas de microtransacciones y "lootboxes", una mecánica popular entre los últimos lanzamientos que busca que el usuario pague pequeñas sumas de dinero para volverse más competitivo, y que termina por generar conductas adictivas en el jugador. En la conferencia también se discutió el tema de la inclusión. Cada día tuvo al menos una mesa redonda centrada en la representación de minorías. "La industria es gigante, hoy llegamos a tanta gente que debemos esforzarnos por buscar que todos se sientan a gusto", dice Felipe Quezada, desarrollador del estudio BitPlay, de Concepción. "Este año he visto sobre todo más mujeres. Ha crecido mucho el número de profesionales en la industria, y por lo mismo creo que vale la pena hacer actividades que reflejen todos los perfiles en este evento".
