La expresidenta argentina Cristina Fernández viajó ayer a Cuba para visitar a su hija Florencia Kirchner, quien está en tratamiento médico en La Habana. Por redes sociales, la exmandataria dijo que la salud de su hija se encuentra "devastada" por "la persecución feroz" que según ella la justicia somete a su hija. Florencia Kirchner (29) está procesada junto a su hermano Máximo y su madre, en las causas Hotesur y Los Sauces, por presunto lavado de activos y asociación ilícita. Aunque aún no se ha fijado la fecha del juicio, la situación preocupa a Cristina porque su hija no ejerce un cargo político, por lo que no posee fuero (como ella y su hijo) y, ante una eventual condena u orden de prisión preventiva, podría quedar detenida, dijo La Nación.