¿Qué es lo que las empresas realmente quieren?
domingo, 10 de marzo de 2019
Rosa Martínez
Clasificados Económicos
El Mercurio
Una reciente encuesta muestra que existen algunos patrones entre las personas a las que se les hace más fácil conseguir trabajo y a las que no, pues las primeras calzan mejor con lo que las organizaciones están buscando.
E n la actualidad, la búsqueda laboral está cada vez más competitiva por diversos factores, tales como la saturación de los campos, la excesiva competencia, y la presencia de profesionales más preparados. En este escenario, muchas personas se preguntan: ¿por qué existen profesionales a los que no les cuesta encontrar trabajo, mientras a otros se les hace sumamente difícil? Hugo Álvarez, director del Programa de Reubicación de Potencia Laboral, señala que, en efecto, aún existe un segmento al que no le toma mucho tiempo emplearse, a diferencia de otros que, por más que se preparan, no logran emplearse. Según el ejecutivo, ciertos postulantes pueden estar muy preparados en la parte técnica para enfrentar una entrevista, pero cometen otros tipos de errores que les pueden significar quedar fuera del proceso: falta de confianza, mostrarse desanimado o nervioso, no hacer preguntas al entrevistador, no ser concreto en sus respuestas y criticar a empresas o jefes anteriores son algunas. El experto añade que otro error es ser demasiado cercano durante la entrevista, pues si bien es importante ser amable y agradable, se debe mantener el profesionalismo en todo momento de la entrevista. Las claves Una encuesta realizada por Potencia Laboral a 1.876 trabajadores con alta empleabilidad (menor a un mes o con trabajo), identificó tres patrones presentes en el perfil de este tipo de postulantes que los hacen ser más apetecidos por las empresas en sus procesos de reclutamiento. Según Álvarez, los patrones más comunes que tienen este tipo de profesionales con una alta empleabilidad son, en primer lugar, el alto foco en su perfil profesional (14,91%), que apunta al conocimiento detallado de sus fortalezas y aspectos a mejorar. En segundo lugar, está la seguridad y confianza (14,11%) que el profesional proyecte en todo el proceso de entrevista laboral. En tercer lugar, destaca el conocimiento de su valor de mercado (13,43%) y su competitividad frente a otros. El experto dice que se trata de personas a las que no les afecta su empleabilidad y que, en muchos casos, renuncian sin tener opciones laborales pero tienen una clara convicción de que podrán encontrar empleo, finalmente lográndolo. Profesionales que no requieren buscar empleo, sino que muchas veces los van a buscar a ellos. "Ya más abajo aparecen también sus habilidades blandas, experiencia y competencias", apunta.
