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Argentina enfrentará elecciones presidenciales el próximo año:

Macri frena la caída de su imagen y exhibe una recuperación de cara a un 2019 electoral

lunes, 17 de diciembre de 2018

LA NACIÓN/ARGENTINA/GDA
Internacional
El Mercurio

El repunte se debe a factores como un mejoramiento del clima social, el éxito de la Cumbre del G20 y la estabilidad cambiaria.



La administración argentina cierra el año con noticias positivas: la caída en la imagen del gobierno del Presidente Mauricio Macri hasta noviembre, luego de la crisis cambiaria y la recesión económica, se frenó en diciembre y la percepción en la opinión pública comenzó a recuperarse levemente, de acuerdo con una encuesta de Poliarquía Consultores sobre el balance del año 2018, realizada entre el 3 y el 14 de diciembre.

La aprobación registró este mes un 39%, mientras que en noviembre había sido del 32%, el peor mes del año. El rechazo, en tanto, es del 59% en diciembre, cuando en noviembre había llegado al 65%.

"Los resultados del estudio marcan un mejoramiento importante de los indicadores de la opinión pública. Se trata de la variación positiva intermensual más importante de la administración Macri", dijo Alejandro Catterberg, director de Poliarquía, a La Nación.

De confirmarse la tendencia al repunte que muestran los números, el mandatario de centroderecha enfrentará el calendario electoral de 2019 con mejores expectativas. Macri aún no confirma que vaya a la reelección en los comicios de octubre, pero en el oficialismo ya lo dan prácticamente por hecho. El escenario electoral debe terminar de conformarse con las definiciones del Partido Justicialista, el peronismo, y los múltiples líderes que tienen aspiraciones presidenciales, entre los que destaca la expresidenta Cristina Fernández (ver recuadro).

El escenario de la coyuntura económica no es el mejor para el gobierno del Presidente Macri, en el poder desde diciembre de 2015. La economía cayó en septiembre 5,8% y llegó al sexto mes consecutivo en recesión. El PIB caerá 2,4% en el año y la inflación rondará el 48%.

Sin embargo, en las últimas semanas Catterberg observó un mejoramiento del clima social, con el éxito de la Cumbre del G20, la estabilidad cambiaria, una desaceleración de inflación, el anuncio del protocolo de seguridad, el pago de aguinaldos y bonos de fin de año, y la ausencia de hechos de violencia callejera.

El análisis de Poliarquía estableció cuatro etapas en el año: de enero a abril hubo estabilidad tras el triunfo de Cambiemos en las elecciones legislativas de octubre de 2017. La aprobación promedio fue del 48% y el rechazo, del 50%, y 2% de indecisos.

Entre mayo y agosto comenzó la caída de imagen, tras la primera corrida cambiaria. La aprobación se estacionó en 39% y la desaprobación en 60%. De septiembre a noviembre hubo otra caída por la segunda corrida cambiaria: apoyo de 33% y rechazo de 65%.

Pese a estas penurias, Poliarquía señala que diciembre puede ser el inicio de una recuperación: "Se observa que los indicadores volvieron a valores similares a agosto", dice el estudio de la encuestadora. La aprobación fue de 39% y el rechazo de 59%.

Principales problemas

La encuesta se realizó sobre la muestra de 1.000 casos residentes en todo el país y tiene un margen de error de 3,2%.

Cuando se les preguntó por el principal problema del país, el 44% dijo el "económico"; el 22% el "político institucional"; el 12% la inseguridad, y 9% el "social".

El 19% dijo sufrir "problemas económicos" en general, el 11% "desempleo", el 10% "inflación", el 2% la mala administración de recursos, el 2% el endeudamiento/FMI y el 1%, los bajos sueldos.

Entre los problemas políticos institucionales, el 9% mencionó "el gobierno nacional"; otro 9% dijo la corrupción; el 3%, la clase dirigente, y el 1%, la falta de justicia.

Sobre la inseguridad, la "inseguridad ciudadana" tuvo 11 de cada 100 menciones y el "narcotráfico", 1. Los que mencionaron como principal problema los dramas sociales, los discriminaron así: pobreza (3%), educación (3%), mala distribución del ingreso (1%), planes sociales (1%) y la mentalidad de los argentinos (1%).

Si se mide mes a mes, la aprobación a Macri comenzó en enero con un 48% y el rechazo, con un 50%. En febrero fueron de 49% y 50%, respectivamente; en marzo, 50% y 48%; en abril, 45% y 53%; en mayo, 36% y 63%; en junio, 42% y 55%; en julio, 38% y 61%; en agosto, 39% y 59%; en septiembre, 34% y 65%; en octubre, 34% y 63%; en noviembre, 32% y 65%, y en diciembre, 39% y 59%.

Si se toman los segmentos poblacionales, la evolución de la aprobación se recupera en todos los sectores, menos entre los residentes del conurbano y los votantes del excandidato presidencial y referente del justicialismo no kirchnerista Sergio Massa que en ambos casos siguen bajando.

"El problema principal de Macri sigue estando en el conurbano bonaerense. Allí su popularidad es significativamente menor que en el resto del país", dijo Catterberg.

Los jóvenes de 18 a 29 años aprobaban la gestión en un 47% entre enero y abril. Bajó al 34% entre mayo y agosto, y al 26% entre septiembre y noviembre, mientras que la tendencia se revirtió en diciembre, con un 30%.

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