Siete creadores de los pueblos originarios para el mundo
jueves, 06 de diciembre de 2018
IÑIGO DÍAZ
Cultura
El Mercurio
Por tercer año, el Ministerio de las Culturas entrega el Sello Artesanía Indígena a autores que recuperan técnicas y creatividades ancestrales.
La tendencia es la misma que el año pasado, cuando este premio se entregó por segunda oportunidad a siete artesanos. Las creaciones de los pueblos originarios siguen teniendo a cultores aimaras y mapuches como nombres principales. Otros siete creadores recibirán hoy el Sello Artesanía Indígena, que entrega el Ministerio de las Culturas. "Eso ocurre porque son los pueblos más numerosos. Existe una correlación entre la cantidad de gente, la presencia en los territorios y la expresión cultural que es la artesanía", explica José Ancan, del Departamento de Pueblos Originarios en el ministerio. "De los nueve pueblos originarios reconocidos, solo el diaguita no ha sido premiado con el sello, y este año por primera vez lo recibió una cultora quechua", agrega. La ceremonia de premiación tendrá lugar hoy a las 19:00 horas en el Parque Bustamante, donde hasta el domingo se realiza la Muestra de Artesanía UC. Con 45 años de vigencia, es la mayor y más antigua cita dedicada a estas disciplinas creativas. Cada artesano de los pueblos originarios recibió $1 millón y cuenta con un stand en la muestra, donde exponen sus piezas diversas des -orfebrería, cestería, escultura, textilería-, y con distintos enfoques -decorativos, utilitarios y artísticos. El premio nació como extensión del Sello de Excelencia a la Artesanía, que desde hace una década premia a artesanos innovadores de todo el país. "Buscamos relevar la creación de obras artesanales indígenas, para que sean entendidas como expresión cultural de los pueblos originarios. Es una poderosa herramienta que contribuye a recuperar y visibilizar conocimientos y técnicas artesanales tradicionales de estos pueblos", dice la ministra de las Culturas, Consuelo Valdés. Una de las piezas más destacadas en este año fue, precisamente, la de la artesana quechua de Ollagüe Victoria Véliz Urrelo, autora de los guantes tejidos con lana de llama y plumas de pato andino, como la huallata. Es una técnica de confección única y, a la vez, comprometida con los ecosistemas locales, dado que recolecta su materia prima en nidos ubicados en lugares de difícil acceso y que se encuentran desocupados en distintos períodos del año. Otras piezas distinguidas son las que presentan artesanas aimara, como el cintillo kili , de Gloria Doris Mamani Vilches; la iguña , un textil a modo de mantel ceremonial, de Albina Valentina Choque Challapa, y el bastón de mando, de María Virginia Gómez y Mercedes Mamani Huanca. A ellas se suman las artesanías mapuches, especialmente orfebrería, como el sikil y tupu , de Carlos Cuesta, y el kawinkura o kultrun , de José Cayuqueo Torres, junto al reimiro rapanuí de Tevo Pakarati.
