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EL ANTOFAGASTINO TRATA DE ABRIRSE PASO EN EL CIRCUITO

El renacer de Bastián Malla: "Estuve a punto de retirarme del tenis"

miércoles, 21 de noviembre de 2018

Rebeca Ampa
Deportes
El Mercurio

El zurdo confiesa que dejó de sufrir y que ahora disfruta en la cancha: "A Garín le pasaba lo mismo que a mí", dice sobre su compañero en el título mundial sub 14 de 2010. A sus 22 años sueña con ser llamado al equipo de Copa Davis.



A sus 22 años, Bastián Malla dice que, por fin, está empezando a disfrutar el tenis. Que todo lo malo que vivió y que cada golpe que se pegó lo hicieron madurar y, sobre todo, valorar lo que estaba haciendo.

"Era lo que tenía que vivir, lo que tenía que pasar para darme cuenta de muchas cosas", le comenta a "El Mercurio" en la antesala de su debut en el futuro 2 de Santiago (ayer venció en su estreno al argentino Juan Ignacio Galarza, 398º, por 3-6, 6-4 y 6-4 en Las Brisas de Chicureo).

Casi desaparecido del mapa tenístico nacional en los últimos años, luego de una extraordinaria irrupción en su etapa junior junto a Christian Garín, el zurdo antofagastino viene abriéndose camino en el circuito de futuros e intentando entrar a otros más grandes, ya que su actual ranking (475º ATP) lo obliga a disputar las clasificaciones.

"Hace dos meses, los futuros de Perú fueron el inicio de toda esta senda. Yo estuve a punto de retirarme del tenis, pero el 'Checho' (su mánager Sergio Cortés) vino y me empezó a ayudar con el tema económico. Y llegó esa gira a Perú. Ahí empecé a pelear todos los puntos, a no regalar nada, y los resultados se empezaron a dar", dice el nortino.

Malla reconoce que en agosto vivió uno de sus peores momentos: "Fue cuando llegué de Italia, donde lo pasé muy mal: estuve tres meses, me quedé sin plata, la tuve que luchar, pedir muchos favores, quedarme en casa de gente extraña... Al final pude volver a Chile y estuve cuatro semanas en mi casa sin hacer nada, y llegó el 'Checho' a decirme que no podía desperdiciar mi talento".

-¿Siente que desperdició estos últimos años?

"Uno nunca pierde el tiempo, siempre aprende de las cosas malas. Me sirvió para darme cuenta de muchas cosas, de disfrutar en la cancha más que sentir toda la presión que me generaba. Y ahora quiero disfrutar".

-Y no sufrir, como reconoció Christian Garín que le pasó a él.

"A él le pasaba lo mismo que a mí. Y creo que más, porque se generó mucha expectativa, había mucha presión y no disfrutamos de ese momento de junior. Nos exigíamos como si fuéramos profesionales, pero éramos chicos que estábamos aprendiendo... Veo ahora a mi hermano de 16 años y es un niño".

-¿Quiere emularlo?

"Lo que hizo este año fue tremendo. Ganarse tres challengers seguidos; ahí demuestra su madurez tenística y mental. Estoy muy feliz por él y porque esto va a ayudar al tenis chileno. No me quiero generar expectativas y presiones, pero obviamente que me gustaría. Aunque si uno se crea muchas expectativas, se cree muy bueno, empieza a tener más ego y eso después te destruye".

-¿Y piensa en la Copa Davis?

"Me sentiría orgulloso si me llaman. Nunca la he jugado".

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