Dólar Obs: $ 981,71 | -0,07% IPSA -0,25%
Fondos Mutuos
UF: 37.079,21
IPC: 0,60%
La marca de Rafael Viotti, el atacante de Santiago Wanderers:

El amuleto de los ascensos que nunca jugó en Primera

miércoles, 14 de noviembre de 2018

Claudio Herrera
Deportes
El Mercurio

El ariete argentino subió con San Luis, Everton y La Calera aportando goles decisivos, pero nunca disfrutó el premio de competir en la máxima categoría. "Sueño que mi hijo me vea jugar en Primera", dice el artillero, que hoy disputará la primera final de la Liguilla ante Cobresal, en Playa Ancha.



Rafael Armando Viotti (30 años) se transformó, a punta de goles imposibles, en patrimonio de la Primera B. Ascendió con tres clubes distintos y ahora está en carrera con Santiago Wanderers para culminar su cuarta hazaña.

La historia del trasandino, que antes jugó en San Telmo, Argentinos Juniors, Aldosivi y Tristán Suárez, es difícil de imitar. Aterrizó en Chile en la temporada 2014-2015 y empujó el regreso de San Luis a la categoría máxima. Lo mismo hizo en la campaña siguiente con Everton y el año pasado fue el héroe del ascenso calerano, tras anotar un gol agónico en la liguilla de promoción, justamente frente a los "caturros" en Valparaíso.

Víctor Rivero fue su técnico en esas tres campañas y no dudó en pedirlo en cada uno de sus proyectos. "En los tres ascensos, Viotti fue el mejor jugador del equipo y el mejor del torneo. Es un tipo que marca diferencia en la división. Él todo lo que ha logrado en la B ha sido para jugar en la A, pero por esas cosas del destino no lo ha podido hacer y también por lealtad a la persona que lo ha llevado a todos los clubes. Tiene potencial de sobra para jugar en Primera, porque hace los goles en los partidos más decisivos", sostiene el ex coach calerano.

Viotti enumera las contingencias que hasta ahora lo privaron de jugar en el fútbol grande. "En San Luis la primera vez me tocó ascender, pero después se desmanteló el grupo y la dirigencia que tomó el club no me iba a tener en cuenta. Rivero no dudó en llevarme a Everton y también se llegó al objetivo. (Antonio) Bloise era el dueño del club y lo vendió a los mexicanos, que no me tenían en los planes. El problema fue que nadie me lo dijo en la cara. Luego, Víctor (Rivero) me vuelve a llamar para ir a Calera, subimos y pude haber seguido en el club, pero me pasó algo insólito: me pidieron renunciar a unos premios que yo tenía y resignar un porcentaje del pase. No acepté y seguí mi rumbo".

-Cualquier equipo que quiera subir lo llamará.

"Capaz que hoy me toca vivir eso, algunos amigos me joden y me dicen 'el amuleto', pero tengo la ilusión de jugar en Primera, sueño que mi hijo me vea ahí. Llevo cuatro años y medio en el país y quiero tramitar la ciudadanía para ser chileno. Ojalá se dé otra vez el ascenso, soy un agradecido de Wanderers, porque el año pasado, tres días después que subí contra ellos, me llamaron para que viniera y les quiero retribuir".

 Imprimir Noticia  Enviar Noticia