lunes, 12 de noviembre de 2018
Pablo Tirado Puerto Varas
El_Mercurio
La zona se ha convertido en uno de los mayores hubs del país. De la mano del apogeo provocado por la industria del salmón y gracias a un entorno privilegiado, ciudades como Puerto Montt, Puerto Varas y Osorno están siendo testigos del crecimiento de proyectos de alcance global.
A los principales actores del ecosistema emprendedor de la Región de Los Lagos les gusta decir que en la zona existe la mayor cantidad de emprendimientos e innovaciones per cápita del país. Si bien no existen datos oficiales que lo corroboren, basta recorrer un poco ciudades como Puerto Varas, Puerto Montt u Osorno para notar que en el sector está pasando algo que lo tiene convertido en uno de los mayores polos de innovación del país. "Hay dos cosas que son fundamentales para el auge de esta región. El primero tiene que ver con la industria salmonera, una actividad pujante, que genera empleo y oportunidades para proveedores. A pesar de todo lo malo que se pueda decir que tiene, es lejos el motor económico más potente de la región. Lo segundo tiene que ver con el entorno, que atrae talento, gente que busca calidad de vida, que busca otra cosa", comenta Anette Krohn, gerenta de Endevor Patagonia, quien lleva varios años encabezando las operaciones de la red de emprendedores de alto impacto en el sur de Chile. Sueca de origen, pero con más de 16 años viviendo en el país, Krohn explica que otra de las ventajas que han vuelto atractiva a la zona a ojos de los emprendedores es la conectividad que ofrece. En ese sentido, cuenta que utilizando tanto la tecnología como las rutas navieras y aéreas, desde la zona se puede "salir al mundo" prácticamente sin la necesidad de pasar por Santiago. Respecto del atractivo natural, Gonzalo Santamarina, fundador de Innovex -firma líder en el uso de software y sensores para el control de los cultivos de salmón- cree que se puede emprender desde cualquier lugar, pero que cuando se busca innovar la cosa es distinta. "Es muy importante que el innovador se tiente con el lugar y quiera vivir ahí. Esa es una de las ventajas de esta zona. Si te fijas, los lugares que son íconos de la innovación en el mundo son todos bonitos", dice. Y parece que el imán turístico de los lagos y volcanes funciona. "Esta semana he hablado con gente híper capacitada que se vino a vivir o se quiere venir. Se dio que las salmoneras tenían a la gente viviendo acá, entonces se atrajo capital humano de buen nivel y de forma rápida", agrega Franco Valdés, productor de cerveza artesanal y dueño del popular restaurante Mesa Tropera. Otra de las organizaciones que han logrado posicionarse en la zona es Sistema B, iniciativa que tiene a Comunidad B Patagonia como su principal brazo gestor. Liderada por Francisca Sotta y Valentina Orrego, se trata de una agrupación que trabaja por promover y visibilizar la filosofía B -que busca que el éxito empresarial se mida también por el bienestar de las personas, de las sociedades y la naturaleza- en la Patagonia. Y tanto es el auge del movimiento que esta semana, desde el 13 al 16 de noviembre, se estará desarrollando en la zona el Primer Encuentro Mundial del Movimiento B. Organizaciones e instituciones como Corfo, ProChile, Austral Incuba, Red Pyme Mujer, Compite, el Centro de Desarrollo de Negocios Osorno o Potencia Patagonia están siendo parte también de esta nueva cultura proinnovación que se está potenciando en Los Lagos. "Inicialmente hubo un rol de Corfo, en el cual nos sentíamos responsables de armar esto, de incentivarlo y estimularlo. Abrir las posibilidades de que lleguen nuevos actores, llamarlos a participar y atreverse a venir al sur. Y creo que al cabo del tiempo, estos actores tomaron vida propia y hoy día estamos en una etapa en donde Corfo ya no es el único articulador", dice Claudia Huber, subdirectora Regional Corfo en Los Lagos. Como en todo ecosistema de innovación, en la región el factor financiamiento es vital para el desarrollo. Sin embargo, acá gracias a alianzas público-privadas y al apoyo también de emprendedores exitosos, han podido solucionar parte de ese problema. "El gran desafío para que puedas encontrar financiamiento es que tienes que hallar una propuesta innovadora (...) El ecosistema está tan propicio que deja que nazcan nuevas ideas con nuevas propuestas", explica Paulette Irarrázaval, fundadora de Red Pyme Mujer. Salmones, el punto de partida Es imposible escindir a la Región de Los Lagos de la industria del salmón. Y si bien el sector ha sido el culpable de muchas de las crisis que ha enfrentado la zona, es también una fuente de oportunidades, especialmente si se piensa en los mercados globales. Un claro ejemplo es el de Cristina Navarro, quien junto a dos socios -entre ellos su hermana Ximena- fundó Bioled, una compañía que ofrece sistemas de luces led para fotoperíodo, las que ayudan a la eficiencia de los cultivos de salmones. La firma partió desarrollando y comercializando lámparas sumergibles con una innovadora tecnología que pocos entendían por esos años. Era la época previa a la crisis del virus ISA y pocos se fijaron en ellos, luego vino el desastre y la industria prácticamente desapareció. Por esos años, recuerda Cristina Navarro, subsistían dándoles algún tipo de uso práctico a las luces led que habían importado. Con el tiempo, la salmonicultura revivió y su negocio también. Ahora, eso sí con cambios: en Bioled entendieron que no podían vender solo las lámparas, sino que también el servicio completo de monitoreo, investigación y gestión. Y en eso están ahora, convertidos en líderes en la industria y con un ambicioso proyecto de internacionalización que ya comenzaron en Oceanía y Canadá, y que tiene como guinda de la torta a Noruega, la mayor industria salmonera del mundo. Tan impresionante como esa es la historia de Manuel Rozas y Kura Biotec, compañía que utilizó los desechos del cultivo del abalón para la producción de un compuesto que se comercializa a nivel mundial y que se usa en la toxicología forense, específicamente para la detección de droga. Con un moderno y recién inaugurado laboratorio en Puerto Varas, la compañía tiene diversos clientes, entre los que se cuentan, por ejemplo, el FBI. Tecnología desde el sur Llegados de distintas partes de Chile y del mundo, los emprendedores están demostrando que desde Los Lagos se puede hacer cualquier cosa. Teófilo de la Cerda, por ejemplo, dirige desde Puerto Varas su compañía CurrencyBird, que se dedica al mercado de las transferencias internacionales mediante pago electrónico. En la misma ciudad está basada también Imaginex, firma experta en facturación electrónica, que cuenta entre sus productos más conocidos al software de venta con boleta electrónica pensado para pymes B Sale. La compañía tiene clientes a lo largo de todo Chile y hace poco comenzaron operaciones en Perú. "Estar en Puerto Varas me obliga a tener reuniones virtuales, que son más eficientes. Me demoró 20 minutos por reunión y en Santiago quizás me podría haber demorado tres horas", dice Antonia Cavagnaro, gerenta de Marketing de Imaginex.
