"Es rápido y juega bien". Así definen en el cuerpo técnico de Colo Colo al delantero Alexander Bolaños, nacido hace 19 años en Esmeraldas, Ecuador, y promovido recientemente al primer equipo albo. El buen rendimiento que ha mostrado en la Sub 19, donde es dirigido por Manuel Crespo, y sobre todo el nivel exhibido ante Universidad Católica -el último viernes, jornada en la que anotó un gol y el equipo blanco se impuso por 4 a 1- le valieron ser considerado por Héctor Tapia. "Juega de puntero, en una posición donde no tenemos muchos especialistas, y tiene buen físico. Ojalá mantenga el nivel", agregan desde el búnker de Macul. Bolaños, quien es primo de Alex y Miller Bolaños, ambos seleccionados de su país, llegó a Colo Colo en 2015. Fue Aníbal Mosa, en su condición de presidente de Blanco y Negro (ByN), quien accedió a pagar los US$ 60 mil que costó su carta. "Desde que llegué a Chile, mi meta era quedarme en Colo Colo, y lo logré. Me vine a probar, estuve mucho tiempo a prueba, como seis meses... No vi a mi familia en un año, y eso me llenó de energía para seguir. Colo Colo es mi familia. Aquí he aprendido muchas cosas, a convivir, a valorar. Me han ayudado en los estudios, me enseñaron cómo debía comer y cuidarme", contó el atacante, hace unos meses, al sitio oficial del Club Social y Deportivo. Bolaños vive en la Casa Alba y en sus primeros tiempos tenía un pituto: cortar el pelo a sus compañeros. "Tengo un primo que es peluquero; para uno de mis cumpleaños me regalaron una máquina y comencé a cobrar dos lucas por corte. Casi siempre hago degradado", agrega. SU PRIMER PARTIDO FUE ANTE LA SERENA. Y CONVIRTIÓ DESPUÉS DE ELUDIR AL DEFENSA DE TURNO CON UNA BICICLETA Y DEFINIR AL PRIMER PALO.