Sistema B realizó un catastro con las principales organizaciones que entregan su apoyo a emprendimientos y proyectos que buscan generar un efecto más allá del plano económico. "Medir y gestionar el impacto socioambiental se está transformando en un elemento diferenciador que trae consigo mejor rendimiento financiero y acceso a una red de inversión, aceleración y créditos que reconoce y valora este impacto", dice Alfredo Zepeda, director ejecutivo de Sistema B Chile.