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"La ciudad al instante", la galería callejera de fotografías de Mauricio Ferrada

sábado, 18 de agosto de 2018

Bárbara Alcántara A.
Vidactual
El Mercurio

Fachadas coloridas y pintorescas son la esencia de las colecciones del publicista y creador de un proyecto que busca exhibir detalles de las ciudades que visita. El fotógrafo, errante por naturaleza, conversó sobre su historia y su singular galería.



"Lo que yo quiero hacer es democratizar la fotografía", dice Mauricio Ferrada (36), publicista de profesión, pero fotógrafo de oficio. Pasión que tuvo sus inicios gracias a los largos trayectos en bicicleta o en long board que solía hacer desde Vitacura, donde trabajaba en una agencia de publicidad, hasta Cerro Navia donde viven sus padres y pasó su infancia. Dichos recorridos tenían pausas turísticas en barrios emblemáticos de la capital cuyos recovecos servían de inspiración para un artista que aún no encontraba una ocupación que lo complaciera del todo y para quien, sin saberlo, esa actividad que lo cautivaría estaba, literalmente, a la vuelta de la esquina.

"Instagram fue fundamental para mi desarrollo artístico, ahí empecé a ver fotografías de otros lugares, lo que me motivó para mostrar mi Santiago, que es una ciudad que me encanta, de manera cotidiana y bonita", afirma. A eso agrega que le llamó mucho la atención el formato cuadrado de la aplicación; según él, eso "facilita la composición"; encuadres que se vieron reflejados en la cuenta que bautizó como "La ciudad al instante" y que hoy tiene más de 198.000 seguidores. "El nombre viene por rescatar instantes de las ciudades, pero también deriva del nombre de Instagram", explica y agrega "en un momento pensé en 'Santiago al instante', pero después me di cuenta de que me limitaba. De esta manera puedo retratar y exponer cualquier lugar en el planeta".

A esa inquietud fotográfica se sumaron las ansias por viajar y la falta de motivación en su trabajo. Tres elementos que en el 2013 lo empujaron arriba de un avión con destino a Bogotá sin fecha de regreso y con un par de pesos en el bolsillo. "El objetivo era mostrar la realidad urbana de Colombia", dice mientras se toca su larga barba que le da un aspecto hipster y luego explica que a pesar de que en cada país retrata fachadas, hay miles de detalles que marcan las diferencias, "puede ser una puerta, el cartel numérico, los grifos, las calles, las ventanas, los colores y hasta los grafitis son diferentes".

De este modo, Ferrada armó un pequeño stock de material y cuando ya no le quedaban fondos, echó mano a su arte para subsistir, imprimió sus estampas y se animó a vender. La primera fotografía por la que recibió dinero fue en un lugar que había captado durante sus primeros días de viaje. Entró al mismo boliche, mostró la imagen al dueño que incluía una motocicleta antigua que habían vendido hace poco y ese elemento significó una compra segura, no sólo de esa captura sino de otras treinta más. "Ese día salí con dos mil y volví con 120.000 pesos" dice entre risas.

Fotografiando el mundo

Buenos Aires y Río de Janeiro fueron las protagonistas de la siguiente colección, viajes en los que pasaba las noches en buses o hacía trabajos de carpintería en hostales a cambio de alojamiento. A esas alturas, el formato había evolucionado en fotografías con una base de madera bien lijada y con el orificio listo para ser colgadas, "yo no quería que mi trabajo se quedara por ahí como tantos afiches que alguna vez compré y no enmarqué, mi idea era que mis fotos se fueran directamente al muro", aclara.

Si bien la vida nómade le acomodaba, siempre regresaba a Chile y fue en una de esas pausas que conoció a la catalana Cristina Cárdenas, quien se transformaría en su esposa y madre de su primer hijo. Considerando esto, el próximo destino estaba zanjado, se trataba de Barcelona cuyas legendarias callecitas serían la estrella de los nuevos retratos.

La gira 2015 también incluyó Berlín, Bruselas, Bratislava, Praga, Budapest, Viena y Ámsterdam, ciudades donde los pasos para montar su galería móvil son, primero, conseguir la madera, luego un buen espacio callejero y turístico donde montar la exhibición.

De eso han pasado ya tres años y el proyecto se ha masificado, los viajes anuales no se detienen y actualmente Mauricio es embajador de una conocida marca de celulares con el que hace sus fotografías. Además, el 2017 participó en el Bazar ED y en Art Santiago, creó su sitio web (www.laciudadalinstante.cl) donde se puede apreciar su trabajo desde los inicios y al mismo tiempo, sus estampas están desperdigadas en distintas tiendas de decoración de Santiago, en las que el mismo se preocupa de montar un muro del que cuelgan sus cuadros y así no pierdan su esencia. "La idea es que se vean colgadas y no en un estante", enfatiza.

A pesar de los mencionados cambios y avances, Ferrada continúa con su galería callejera y cada fin de semana es posible encontrarlo en el Barrio Lastarria, específicamente en la calle Merced 323, donde cuenta con un permiso especial de la Municipalidad para colgar sus fotografías y exhibir aquellos instantes urbanos que lo mueven no tan sólo físicamente sino también a nivel emocional. "Amo mi proyecto, así partió y así me quiero mantener, en la calle", remata.

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