El militante anticastrista cubano en el exilio y ex agente de la CIA, Luis Posada Carriles, quien fue acusado de organizar una serie de ataques con bombas a hoteles de La Habana en 1997 y de derribar un avión cubano de pasajeros, falleció ayer en Florida, informaron su abogado y un amigo. Tenía 90 años. Posada Carriles, quien padecía cáncer de garganta hace unos cinco años, murió en el Hospital Memorial Regional de la ciudad de Hollywood, al norte de Miami.