Dólar Obs: $ 950,77 | -0,31% IPSA -0,25%
Fondos Mutuos
UF: 37.232,24
IPC: 0,40%
Mañana los relojes se retrasan 60 minutos:

El cambio de hora puede ser el momento para regular el sueño

viernes, 11 de mayo de 2018

C. G.
Vida Ciencia Tecnología
El Mercurio

Los adolescentes y jóvenes son los que se beneficiarían de obviar la hora de más y mantener su actual horario para acostarse, porque generalmente siempre tienen una fase retrasada de sueño.



Este sábado los relojes se retrasan en 60 minutos en casi todo el país y con eso comienza el horario de invierno. Esto, para una gran mayoría de chilenos, significará volver a despertar con luz natural, pero, además, la oportunidad de ordenar los hábitos de sueño.

"Con este cambio de hora volvemos a un horario más cercano al que deberíamos tener", precisa el doctor Pablo Guzmán, neurólogo y director médico de la Clínica Somno, centro especializado en trastornos del sueño. Una opinión con la que concuerdan muchos especialistas que en los últimos días han expresado a través de los medios la sugerencia de mantener este horario durante todo el año.

"Para lograr un mayor descanso y despertar bien es sumamente importante tener luz en la mañana, por su luminosidad y tipo de color, ayuda a que el ciclo circadiano -el reloj biológico que regula al organismo- se ajuste lo mejor posible".

Un buen descanso implica una serie de beneficios, desde un mejor ánimo y humor al día siguiente, mayor concentración y rendimiento, hasta un mejor peso: está demostrado que malos hábitos de sueño inciden en el sobrepeso y la obesidad.

Antes de dormir

Por eso los especialistas aconsejan aprovechar que se gana una hora de sueño para sacarle partido. "Es fundamental en los niños y, sobre todo, en los adolescentes y jóvenes", que tienen una fase retrasada del sueño (se tienden a acostar más tarde), como explica el doctor Víctor Zárate, especialista en salud pública y director de la carrera de Medicina de la U. San Sebastián.

Para quienes se levantan temprano -y con gran esfuerzo- en las mañanas, un buen consejo es mantener los mismos horarios que usaban para acostarse y levantarse hasta ahora. Es decir, "si iban a dormir a las once de la noche, que lo hagan a la que ahora serán las diez", explica el doctor Guzmán.

Con eso ganan una hora más de sueño y descanso. Esta recomendación, en cambio, no corre para aquellas personas que tienen un reloj biológico que las hace despertar siempre temprano y a la misma hora. "Para que no comiencen a despertar más temprano de lo habitual, se recomienda ir corriendo el horario de sueño. Si se acuestan a las diez, a partir de mañana hacerlo también a las diez, pero de la nueva hora".

La adaptación al nuevo horario puede tardar entre una y dos semanas, agrega el doctor Zárate, por lo que no hay que angustiarse en los primeros días y esperar a que termine esta transición.

Para facilitar ese proceso, agregan, es útil poner en práctica otros hábitos de la llamada "higiene del sueño", como evitar las siestas si se tiene problemas para quedarse dormido en la noche; consumir alimentos livianos antes de dormir -evitar alcohol y cafeína-, no realizar actividad física intensa y, en cambio, preferir ejercicios de relajación o meditación.

Asimismo, reducir la exposición a pantallas de celulares, TV y computadores en la noche, ya que su luz altera el sueño y favorece el insomnio.

 Imprimir Noticia  Enviar Noticia