Los registros que se llevaron la atención de la fiesta en Ñuñoa
lunes, 23 de abril de 2018
Deporte Escolar
El Mercurio
Laura Acuña, en Intermedia, junto a Trinidad Hurtado y Sebastián Martin, en Superior, fueron los únicos que pudieron lograr récords en el certamen. Cada uno con una particular historia.
U no superó a su hermano, la otra a sí misma y la restante borró una marca de casi una década. Así, cada uno en su estilo, fueron los tres récords que se lograron en el Estadio Nacional. Por ejemplo, Laura Acuña (16 años, 3º medio, Liceo Bicentenario Araucanía, de Villarrica) contó que "el sábado corrí en el Campeonato Nacional Adulto Fedachi, y ahora en el Preparatorio, porque no me quiero perder ningún torneo escolar. Me queda poco para cerrar esta etapa y quiero aprovecharla al máximo". Y lo hizo, pues superó la plusmarca de los 800 metros en Intermedia, que ella misma había establecido hace tres años en Osorno. De 2:15.50 bajó a 2:14.96. "Supe inmediatamente que hice el récord. Ahora quiero ir a los Juegos Olímpicos de la Juventud, tengo que clasificar en Nicaragua en junio y me voy con mi entrenador a Colombia a una concentración de un mes", contó. Lo de Sebastián Martin (18 años, 4º medio, Verbo Divino) fue una lucha fratricida. Superó en tres centímetros la marca de garrocha Superior (de 4,82 a 4,85), que pertenecía a... ¡su hermano! Hace menos de seis meses, en el Interescolar Final, Eduardo Martin se había impuesto en la prueba. "Estoy feliz, es a lo que vine. Sacar el récord era una de mis metas para este año y para esto entrené todo el verano. Tenía ganas de saltar 5,10 metros, lo necesario para el Mundial, aunque igual esta es mi mejor marca compitiendo", confesó. Además, fue segundo en salto alto (1,95) y tercero en largo (6,97). Y adelantó: "Para el Interescolar Final quiero salir mejor atleta". La tríada la completó Trinidad Hurtado (17 años, 4º medio, Santa Úrsula), quien estampó su nombre en el salto largo Superior. Borró por cuatro centímetros el anterior registro, que pertenecía a María Paz Dittborn (Villa María, 2009), pasando de 5,70 metros a 5,74. "Llevaba entrenando harto, pero la competencia estaba muy difícil, así que estoy muy contenta. La experiencia en el (Grand Prix) Orlando Guaita -disputado una semana antes- me sirvió mucho para empezar a calentar motores y tener una buena competencia acá", apuntó. "Este es mi último año, y quiero despedirme de buena forma. Para lo que queda de 2018 quiero mejorar mis marcas para ver si logro clasificar a algún campeonato internacional", agregó Trinidad, quien también se quedó con la plata en los 100 metros planos (12.82) y el bronce en los 100 metros vallas (15.38). "Estuvo todo súper competitivo", finalizó.
