Manejo sustentable de áreas críticas, como cuencas hidrográficas, para mantener y aumentar el abastecimiento de agua para consumo humano y la destinada a riegos agrícolas. Asimismo, establecer una relación fluida con habitantes de zonas rurales y etnias originarias asentadas en las cinco regiones del extremo norte para combatir con mayor efectividad la ocurrencia de incendios forestales, además del cuidado de bofedales, flora y fauna. Esos serán algunos de los focos de trabajo del plan de manejo de zonas áridas y semiáridas del país para el período 2018-2021, lanzado ayer por el Gobierno y que abarcará a las regiones de Arica, Tarapacá, Antofagasta, Atacama y Coquimbo. "En el norte tenemos formaciones vegetacionales, especialmente xerofíticas, usadas desde hace 12 mil años, y lo que hacemos ahora es ver cómo mejoramos estos sistemas, con cuidado, integrando opciones no sólo madereras, sino que de productos no madereros y turismo", señaló Aarón Cavieres, director ejecutivo de la Conaf.