¿Oprah candidata? Los rumores evidencian los problemas del sistema político de EE.UU.
viernes, 12 de enero de 2018
HENRIQUE GOMES BATISTA O Globo/Brasil/GDA
Internacional
El Mercurio
WASHINGTON Ante la incredulidad de los partidos, abrir la puerta a las celebridades trae riesgos para la renovación.
El frenesí creado en torno a una eventual candidatura presidencial de Oprah Winfrey en la elección de 2020, en la cual desafiaría la apuesta por la reelección de Donald Trump, comienza a ser tomado en serio por los demócratas. El nombre de la ex presentadora y multimillonaria, que no tiene experiencia política -como Trump-, empezó a debatirse tras su discurso en los Globos de Oro, el domingo pasado, y llevó a la primera encuesta entre ambos, con una clara ventaja para Oprah. Pero mientras muchos ven una oportunidad para que los demócratas reconquisten el poder, otros alertan que una nueva outsider evidencia los graves problemas de los partidos en el sistema político estadounidense. Un sondeo de Rasmussen Report, hecho entre el lunes y el martes, le da a Oprah el 48% de las intenciones de voto, contra el 38% de Trump, con un 14% de indecisos. Ella sería apoyada por el 76% de los electores demócratas, 22% de los republicanos y 44% de los independientes. Trump, quien alguna vez dijo que le gustaría tener a Oprah como Vicepresidenta, afirmó que le encantaría competir con ella, pero que le ganaría. Oprah, quien ha negado la posibilidad en el pasado, se estaría inclinando cada vez más por una candidatura, según sus cercanos, después del discurso. Pero puede que ellos dos no estén solos: Mark Zuckerberg, el multimillonario fundador de Facebook, y los actores Dwayne "The Rock" Johnson (que ya habló del tema seriamente) y George Clooney (quien ha satirizado con el tema, pero comienza a ser tratado como una opción posible) son celebridades que rondan a los demócratas. En el lado republicano, el emprendedor y actor Mark Cuban, dueño del equipo de básquetbol Dallas Mavericks, afirma que quiere competir con Trump en las urnas. "En vez de estar pensando en proyectos y programas, los partidos parecen estar cada vez más encantados con los salvadores de la patria", afirmó Peter Hakim, presidente emérito del Diálogo Inter-Americano. "Y antes de que digan que es un fenómeno global, nada es parecido a lo que tenemos aquí. Solo en EE.UU. alguien surgió de la nada a la Presidencia. Aquí y en Guatemala", añade. Hakim recuerda que todos los otros outsiders que llegaron al poder recientemente, como Emmanuel Macron en Francia, Mauricio Macri en Argentina, y Pedro Pablo Kuczynski en Perú, tuvieron experiencias anteriores como ministros o como funcionarios. El experto cree que la falta de políticos profesionales en el horizonte presidencial estadounidense aumenta los riesgos para el país, que generalmente escoge entre senadores o gobernadores a la persona que llega a la Casa Blanca. La experiencia administrativa es fundamental, en su opinión, para evitar errores groseros que pueden tener impactos fuertes, como los que se han visto en el gobierno de Trump. "Los partidos estadounidenses están cada vez más polarizados, con ambos casi exclusivamente controlados por las alas más radicales de sus partidarios (o sea, donantes y electores en las primarias), lo que hace que la política sea ineficaz y aislada", escribió en The Guardian Cas Mudde, profesor de la Universidad de Georgia e investigador del Centro de Investigaciones sobre Extremismo de la Universidad de Oslo. Y, en este momento de desencanto generalizado, los outsiders están en ventaja frente a los políticos tradicionales, usando la inexperiencia como atractivo. "Las celebridades nunca han enfrentado el desgaste de un gobierno, o no han tenido que tomar decisiones impopulares", explica Juan Carlos Hidalgo, analista de políticas públicas del Instituto Cato. "Muchos dicen que Oprah es distinta a Trump, porque tiene más compromiso social y político. Ahora, Trump siempre tuvo opiniones políticas. Él fue cambiando de opinión en el transcurso del tiempo, para defender puntos de vistas conservadores". Para Hidalgo, los demócratas saben que tienen pocos nombres disponibles. Bernie Sanders, la sensación de las primarias pasadas; Joe Biden, el Vicepresidente de Barack Obama, y la senadora Elizabeth Warren, todos tendrán más de 70 años en 2020. Las promesas, como las senadoras Kamala Harris y Kirsten Gillibrand, y el senador Cory Booker, aún no han conseguido unir al partido. Líderes demócratas intentaron ir más allá de las posibilidades de que Oprah sea la candidata del partido. Nancy Pelosi, la líder del partido en la Cámara de Representantes, declaró que Trump es el mayor impulsor y el mayor obstáculo para su candidatura. Elizabeth Warren, afirmó que no sabe si después de Trump, los estadounidenses no preferirán un candidato con más experiencia. David Axelrod, el ex estratega jefe de Obama, sostiene que Oprah tiene un "potencial político único", pero teme que ella no quiera enfrentar los riesgos de una campaña. "¿Le gustaría someterse al proceso implacable y a veces absurdo de ser candidata a la Presidencia?", se preguntó en una entrevista con CNN. Sentimientos encontrados Sin embargo, en las conversaciones privadas los demócratas se muestran más entusiasmados con Oprah. De acuerdo con el sitio The Hill, uno de los principales estrategas del partido dice que "nunca vio tanto entusiasmo por un potencial candidato desde Obama". Según el sitio, "el circuito de los donantes demócratas se encendió, con uno de los principales partidarios del ex Presidente describiendo el ruido en torno a Oprah como bastante interesante y emocionante". Otros, no obstante, afirman que es momento de concentrarse en las elecciones legislativas de noviembre, fundamentales para dar fuerza al partido y frenar el gobierno de Trump, antes de pensar en 2020. Demócratas menos conocidos ya no esconden el entusiasmo de que lo que pudiera ser la primera candidatura competitiva de una mujer afroamericana a la Casa Blanca. "Necesitamos pasión y emoción", dice la diputada Gilda Cobb-Hunter, demócrata de Carolina del Sur. "Le pido que lo piense seriamente. Si alguien nos puede unir, es ella".
En los Globos de Oro, Oprah habló sobre género, pobreza y raza, citando a heroínas de la lucha por los derechos civiles en EE.UU.
